La Cámara de Diputados, a partir de un acuerdo entre el oficialismo y los distintos bloques de la oposición, aprobó esta madrugada por amplia mayoría y giró al Senado un proyecto de ley que aclara y limita la aplicación del cómputo de pena de dos años por uno para los autores de delitos de lesa humanidad, tras la controversia generada por el fallo de la Corte Suprema de Justicia.
La sesión especial que se extendió más de seis horas contó con la presencia en el recinto de la titular de la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, y representantes de Madres de Plaza de Mayo. La oposición pudo imponer que se abra el debate para fijar los alcances de la Ley 24.390, que fue derogada en 2001 y beneficiaba a los detenidos con prisión preventiva por plazos superiores a 2 años, computándoles por cada día de prisión preventiva dos de prisión o uno de reclusión.
El proyecto fue aprobado por la Cámara baja por 211 votos positivos y sólo uno en contra, el del salteño Alfredo Olmedo (Salta Somos Todos) y mañana sería tratado por el Senado.
La norma deja en claro que de acuerdo a la ley 27.156 el beneficio de la denominada ley del 2x1 "no es aplicable a conductas delictivas que encuadren en la categoría de delitos de lesa humanidad, genocidio o crímenes de guerra, según el derecho internacional".
Asimismo, remarca la ley que "el cómputo de las penas" establecido en la ley 24.390 "será aplicable solamente a aquellos casos en los que el condenado hubiere estado privado de su libertad en forma preventiva durante el período comprendido entre la entrada en vigencia y la derogación de aquella ley".
La diputada Victoria Donda (Libres del Sur), hija de desaparecidos, advirtió que "hoy le toca a la política, al poder democrático, a aquellos que fuimos elegidos, nos toca decirle a la sociedad que no vamos a permitir que se quiera levantar un muro de impunidad en nuestro país".
Tras calificar como "brillante" el voto negativo de los jueces de la Corte Ricardo Lorenzetti y Juan Carlos Maqueda, la legisladora cuestionó los argumentos positivos de Rosatti, Rosenkrantz y Highton de Nolasco, que generaron, según su consideración, "uno de los fallos más vergonzantes y aberrantes de la Corte en su historia".