En su segundo día como flamante candidato a gobernador de la Provincia de Buenos Aires por el Frente para la Victoria, el titular de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, arrancó su campaña por La Matanza.
Fue al otro día de mostrarse con el padre de la futura nieta de Cristina Kirchner.
Ayer Domínguez confirmó que el novio de Florencia Kirchner, Camilo Vaca Narvaja, trabaja con él desde 2012. “Hace 2 años me acompaña políticamente y trabaja desde las 7 de la mañana hasta que termino mis actividades, sábados y domingos incluidos”, dijo, en referencia a “Camilito”, como lo llaman los militantes.
Además aprovechó para criticar, sin nombrarlo, al fiscal Alberto Nisman: “No me quedo con el 50% de su sueldo (el de Camilo), como hacía algún funcionario del Poder Judicial”.
En su segundo día como precandidato a Gobernador por el oficialismo, en la recorrida por el distrito electoral más grande de la Provincia, aseguró: “Vengo a La Matanza no sólo porque es la capital de la industria sino también el emblema del peronismo. En Fernando (Espinoza, el intendente) revivimos el sentimiento matancero, que define nuestra identidad peronista”. La candidatura de Domínguez significa una de las primeras definiciones concretas del kirchnerismo duro con respecto a las próximas elecciones. Fue Cristina quien le ordenó dejas sus aspiraciones presidenciales para “bajar” a la Provincia.
Esta semana se dieron a conocer algunas encuestas que lo muestran bien posicionado bajo el sello del FpV.
Según un sondeo de ARESCO, que lo midió con el apoyo de la presidenta, el gobernador y el seño del FPV, el titular de Diputados conseguiría 27,2%, seguidopor Darío Giustozzi (siempre y cuando sea el elegido por Sergio Massa) con 23,8%. En tercer lugar está María Eugenia Vidal, por el PRO, con 17,2%.
