El Senado arrancará la próxima semana con el segundo tramo de la discusión sobre el Presupuesto 2023 y el escenario está prácticamente allanado para su aprobación, luego del caliente debate en Diputados.
La intención del oficialismo es que se convierta en ley el jueves 17 de noviembre, apenas unos días antes del inicio del Mundial, tal como estaba fijado en el cronograma inicial que conformó el Legislativo con el Ministerio de Economía. El trámite arrancará en la Comisión de Presupuesto y Hacienda que comanda Ricardo Guerra. El riojano estuvo presente durante el informe inicial que brindó el ministro de Economía, Sergio Massa, y se mantuvo en permanente contacto con sus colegas de Diputados, con la intención de ir trabajando los acuerdos en ambas cámaras en simultáneo.
Uno de los temas que todavía preocupan a los legisladores del interior es el de los subsidios al transporte, más allá de que el proyecto original que obtuvo la media sanción ya contempla un piso de 85 mil millones a otorgar durante 2023.
Es por eso que para el miércoles fue convocado un plenario de las comisiones de Infraestructura, Vivienda y Transporte y de Presupuesto y Hacienda para tratar una tríada de proyectos para incrementar aún más esa cifra. Son iniciativas de la schiarettista Alejandra Vigo y de los oficialistas Rubén Uñac de San Juan y Sergio Leavy, de Salta, tres provincias interesadas en que sea aun mayor la ayuda de parte del gobierno nacional para compensar los beneficios que se le otorgan a la región del AMBA.
Las dudas por Ganancias. Una de las incógnitas que atraviesan por estas horas el Senado es si el oficialismo insistirá con la incorporación del artículo para que los magistrados y empleados judiciales paguen impuesto a las ganancias.
Por el momento, la balanza parece inclinarse por el “no”, pese a que en el Senado el Frente de Todos tiene los números más holgados que en la Cámara baja.
De acuerdo a lo consultado por PERFIL en términos reglamentarios, el Senado puede volver a incluir, aprobar y reenviar el proyecto con modificaciones a Diputados, tal como lo habilitó la reforma constitucional de 1994. En ese caso, podría aceptar la modificación y aprobarla o no aceptarla e insistir con su sanción original, sin el artículo de Ganancias.
Sin embargo, la clave pasa por lo político. “Para qué perder dos veces”, es el razonamiento que más convence al oficialismo y que, al mismo tiempo, deja tranquila a la oposición. En ese contexto, la vicepresidenta Cristina Kirchner decidió suspender la reunión que tenía prevista para el miércoles al mediodía con la Asociación de Magistrados, que había sido convocada cuando aún existía la confianza de que pasaría el primer test parlamentario.
La tasa para financiar a la Policía de Seguridad Aeroportuaria es otro de los asuntos que generaron molestia en la oposición y que podrían originar algún planteo respecto a la imposibilidad de generar tributos desde el Presupuesto.
