Nicolás del Caño, del Frente de Izquierda y de los Trabajadores Unidad (FIT-U); Juan José Gómez Centurión, del Frente NOS, y José Luis Espert, del Frente Despertar, llegan a la elección con la vista puesta en el Parlamento y en el futuro crecimiento de sus fuerzas políticas en un contexto de fuerte incertidumbre sobre el futuro.
El FIT-U es el único de los tres que, aunque ampliado en este turno electoral, forma parte de una apuesta política de larga data integrada por partidos institucionalizados con fuerte despliegue territorial y presencia en todas las provincias, menos Tierra del Fuego. Por eso, el objetivo está puesto sobre todo en lograr mantener la representación parlamentaria en una elección marcada por la fuerte polarización. La vista se centra en las listas que encabezan Néstor Pitrola y Myriam Bregman, en la Provincia y la Ciudad de Buenos Aires, respectivamente.
En el caso de NOS y Despertar, llegan a esta elección con bastantes problemas a la hora de constituir un frente, a tal punto que hubo deserciones de último momento, como el candidato a gobernador bonaerense de Gómez Centurión, que llamó a votar a Cambiemos esta semana. Institucionalizar las apuestas conservadoras y liberales que trajeron como novedad a esta elección será el desafío a futuro. Los votos del domingo serán leídos en esta clave, la de un impulso para un proyecto naciente.
Espert consolidó su figura pública y mostró en el debate su habilidad para la discusión pública, a pesar del caudal bajo de votos que logró en las PASO, lejos de las expectativas que generaba la caja de resonancia de las redes.
Gómez Centurión, en cambio, tuvo algunos problemas en su presencia mediática y en los debates. Pero su fuerza, especialmente a través de su vice, Cynthia Hotton, mostró el poder de movilización de su base evangelista, con actos multitudinarios en lugares como Córdoba y La Matanza. Para estos dos frentes, cualquier crecimiento en relación con las primarias podrá ser atribuido a estas fortalezas que mostraron.