La explosión ocurrida este jueves en la escuela Nº49 Nicolás Avellaneda del distrito de Moreno dejó un saldo de dos víctimas fatales. Casi de inmediato la Justicia comenzó una investigación para buscar responsables. En materia jurídica, es el Estado de la provincia de Buenos Aires quien debe velar por las condiciones de los establecimientos. Por eso, desde el ministerio de Educación bonaerense aseguraron a Perfil que el miércoles estuvo trabajando en el lugar un gasista hasta las 19 y se retiró del lugar.
En ese sentido, afirmaron a este medio que estaban al tanto de los problemas y por eso mandaron a un profesional. Inclusive, explicaron, que allí se quedó hasta tarde la vicedirectora que hoy falleció.
Las mismas fuentes y funcionarios del municipio de Moreno dijeron a Perfil que el gasista se encontraba declarando en estos momentos en la fiscalía para dar respuestas a los trabajos realizados. “Es una situación muy difícil, que se podría haber evitado. Estamos muy dolidos, hacemos llegar nuestras condolencias a los familiares de las víctimas, a quienes estaremos acompañando”, señaló el intendente Walter Festa.
Según el artículo 203 de la Constitución provincial, es el Consejo Escolar el órgano destinado a desarrollar tareas tendientes a la mejora de la calidad de los servicios Educativos del Distrito, con exclusión de los aspectos técnico-pedagógicos que están a cargo de la Jefatura Distrital de Inspección. El consejero escolar es Sebastián Nasif, quien no atendió los llamados de este medio.
Por esa cadena de responsabilidades, Sergio Siciliano, viceministro de Educación, explicó: “Estoy dialogando con los docentes y —por indicación del ministro— recabando la información para llevar a la Justicia y se determinen las responsabilidad. Las problemáticas se llevan al Consejo Escolar", sostuvo.
El funcionario luego reportó que el miércoles "estuvo un gasista matriculado hasta las 7 de la tarde para resolver la problemática que se había denunciado. Se retiraron del establecimiento y están declarando los responsables, porque por un trabajo mal realizado o por algo que no se tuvo en cuenta, se produjo la explosión del día de hoy". Por otra parte, lamentó que se haga "una utilización política de esta situación tan trágica".
Las víctimas fatales por la explosión en una escuela de Moreno son Sandra Calamano, vicedirectora del establecimiento educativo y Rubén Orlando Rodríguez, portero, quien trabajaba allí desde hacía 30 años.
El hecho ocurrió alrededor de las 8 de la mañana en la escuela situada en Davaine y Félix Roldán, de ese distrito. Los cuerpos de las dos víctimas fueron arrojados a varios metros en medio del estallido y el de la vicedirectora quedó en el medio del patio.
