Graciela Fernández Meijide, exintegrande de la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (CONADEP), se mostró favorable a que se le conceda la prisión domiciliaria al represor Alfredo Astiz, a raíz de sus problemas de salud.
El Servicio Penitenciario Federal (SPF) viene confeccionando listas de presos que podrían cumplir su condena fuera de la cárcel para resolver la superpoblación y entre los posibles beneficiados hay 96 represores condenados por delitos de lesa humanidad, entre ellos Astiz, quien se encuentra en la categría de "enfermos oncológicos".
Astiz fue condenado a cadena perpetua en 2007 y 2011 por el secuestro y homicidio de las monjas francesas Alice Domon y Léonie Duquet, de la adolescente sueca Dagmar Hagelin, del periodista y escritor Rodolfo Walsh, y de las fundadoras de Madres de Plaza de Mayo -organismo en el que se infiltró como familiar de un desaparecido-, Azucena Villaflor, Mary Ponce de Bianco y Esther Ballestrino de Careaga.
Pese a sus crímenes, Fernández Meijide consideró que deberían concederle el beneficio de prisión domiciliaria. "El personaje me sigue provocando la misma reacción de siempre, al mismo tiempo mal nos hubiera ido luchando por el respeto a los DD.HH si no consideráramos quer todos, incluso nuestro peor enemigo tiene derecho a eso", consideró la ex ministra de Desarrollo Social.
En una entrevista con el programa que conduce Luis Novaresio en radio La Red, la exdirigente frepasista afirmó: "Repito lo que digo hace rato y no me importa que me cambien el nombre y el personaje sea otro. A determinada edad o con enfermedades terminales deja de ser una condena con crimen, pasa a ser casi venganza mantener una persona en prisión. Por mí deberían mandarlo a su domicilio con prisión domiciliaria, con lo que corresponde que es la pulsera electrónica y que pudiera atenderse y eventualmente estar cuidado por la gente que designe él mismo o su familia".
"La noche que se llevaron a Pablo se llevaron a cuatro a Campo de Mayo. Lo que nunca pude identificar personalmente y tampoco nadie jamás me llamó y me dijo perdón, aunque sea anónimamente, por lo tanto yo no perdono, no me siento obligada a perdonar. Pero están estos sentimientos contradictorios, no es que yo lo perdone a Astiz ni tenga nada que perdonarle específicamente, yo creo que peleé por otra cosa y mientras me dure la fuerza también lo haré, porque me interesa mucho más el futuro de nuestro país para lo cual necesitamos recordar el pasado", consideró Fernández Mejide.
Consultada sobre si podría aguantar que quien se llevó a su hijo quedara libre, sostuvo: "Me lo banco que salga la persona que secuestró a mi hijo, ¿por qué no me lo voy a bancar? Si me banqué que fuera constitucional la obediencia debida, con lo cual suspendieron todos los juicios, si me banqué que Carlos Menem diera los indultos, estuve en contra pero el asunto es ¿qué hacemos, vamos contra la ley?".
La exministra mostró en esta ocasión la misma postura que tuvo en su momento cuando la Justicia otorgó el beneficio de prisión domiciliaria al represor Miguel Etchecolatz. Al ser consultada por PERFIL se expresó en línea con lo decidido por la Cámara de Casación Penal . "Etchecolatz estaría en la categoría de los más responsables, que jamás se arrepintió", pero "en líneas generales siempre sostuve que aún el peor asesino merece, desde los que somos distintos a él, un trato humanitario en función de la edad que tiene", manifestó.