Al ser consultada por Perfil.com, Graciela Fernández Meijide, exintegrante de la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (CONADEP), se manifestó en línea con lo decidido por la Cámara de Casación Penal al decir que "merece un trato humanitario".
"Etchecolatz estaría en la categoría de los más responsables, que jamás se arrepintió", pero "en líneas generales siempre sostuve que aún el peor asesino merece, desde los que somos distintos a él, un trato humanitario en función de la edad que tiene", manifestó la exministra y madre de un hijo desaparecido.
Por su parte, la agrupación Abuelas de Plaza de Mayo emitió un comunicado en repudio de la decisión de la Sala I de la Cámara Federal de Casación Penal. "La prisión domiciliaria es una excepción, no un privilegio", sostiene el parte de prensa disponible en su página web.
"Debe recordarse que Etchecolatz ya fue beneficiado con la domiciliaria anteriormente y le fue revocada por violar las condiciones de cumplimiento al encontrarse armas en su domicilio, entre otras irregularidades. De la misma manera, no puede pasarse por alto que Jorge Julio López desapareció tras declarar en su contra", apunta el comunicado en otro pasaje.
En este sentido, el abogado de Abuelas, Emanuel Lovelli, declaró que "se hace una interpretación literal del fallo [de la Corte]. Y es una mala interpretación." El letrado recordó también que "la medida no es efectiva" ya que "la sala IV de la misma Cámara le había denegado el beneficio por otra causa". Por esta razón, Etchecolatz seguirá preso.
La medida se dio a conocer días después de que la Corte Suprema fallara a favor del arresto domiciliario para el militar condenado por delitos de lesa humanidad, Felipe Jorge Alespeiti, de 85 años. En ese momento, el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, calificó el fallo como "una buena señal de madurez cívica".
