La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner afirmó este viernes en Plaza de Mayo que "el FMI vivió condicionando a la democracia argentina", volviendo a apuntar al organismo de crédito internacional en momentos en que el propio gobierno negocia la renegociación de la deuda por 44 mil millones de dólares, enfatizando además que el mismo FMI "empujó para que cayeran los presidentes Raúl Alfonsín y Fernando De la Rúa". Y en ese sentido apuntó, sobre las negociaciones que encabeza Martín Guzmán, que "no aprobaremos ningún plan que no permita la recuperación económica". A escasos tres metros la escuchaba el presidente Alberto Fernández, sentado junto a Lula da Silva y Pepe Mujica..
Desde el escenario del festival por el “Día de la democracia”, que conmemora los 38 años desde la asunción justamente de Alfonsín en 1983, la vicepresidenta sugirió a la Unión Cívica Radical (UCR) que "debería despabilarse", porque, recalcó, "el FMI empujó para que cayeran los presidentes Alfonsín y De la Rúa".
Dándole duro tono político a sus palabras y apuntando a la oposición, Cristina afirmó el “FMI le soltó la mano al gobierno naciente de la democracia, pero no lo hizo con el que vino después de nosotros al que le pusieron toda la tarasca”, en referencia a la gestión de Mauricio Macri.
"El FMI debería ayudarnos a recuperar los dólares que están en paraísos fiscales", señaló Cristina. "Porque a la Argentina no le faltan dólares, los dólares de la Argentina se los llevaron afuera", desafío entre aplausos.
"Por eso necesitamos que el FMI nos ayude a recuperar de los paraísos fiscales esos dólares"indicó la vice, precisando que ese dinero "que se encuentre en el exterior se lo vamos a dar al Fondo, de los que se la llevaron sin pagar impuestos, se la fugaron, ese puede ser un punto de negociación", afirmó.
En su discurso Cristina Kirchner además recordó que durante los gobiernos de Néstor Kirchner y el suyo el país tuvo "la jubilación más alta de Latinoamérica", se pagaba el "salario mínimo vital y móvil más alto en dólares" de la región y se "bajó la deuda en dólares" que tenía la Argentina con acreedores externos.
En su discurso, frente a una plaza repleta y en presencia de los expresidentes de Brasil Luis Inácio "Lula" Da Silva y de Uruguay José "Pepe" Mujica, Cristina también reivindicó a las Madres de Plaza de Mayo y a los soldados que cayeron o lucharon en la guerra de las Islas Malvinas como los "que recuperaron la democracia" para la Argentina.
Con un fuerte operativo de seguridad comenzó el festival y, en el escenario montado a metros de la mítica plaza desfilaron los artistas convocados: Peteco Carabajal, Teresa Parodi, Víctor Heredia, los Super Ratones, Ráfaga, Bárbara Recanati, Massacre, Francisco El Hombre, Orkesta Popular San Bomba, Dolores Solá, entre otros.
Alberto Fernández encabezó la entrega de premios en materia de Derechos Humanos
En el Museo del Bicentenario de la Casa Rosada se entregaron los Premios Azucena Villaflor 2021 que distinguen a personalidades destacadas por su compromiso con los derechos humanos. "Hoy es un día de alegría", dijo Estela de Carlotto al recibir el premio en el marco del Día Internacional de los Derechos Humanos.
"Estamos acá por ella (su hija Laura), por los 30 mil desaparecidos, por los jóvenes, por el presente y el futuro de nuestra Patria", agregó la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, quien reafirmó su compromiso con la memoria, verdad y justicia "permanente" para todos los derechos humanos, que incluyen no solo los horrores de la última dictadura militar sino otros flagelos actuales, como la pobreza.
"Tenemos 91 años pero vamos a seguir mientras tengamos vida para que esto no se vuelva a repetir", dijo la activista al recibir su premio en un acto encabezado por el presidente Alberto Fernández -quien dedicó unas palabras- junto a Cristina Kirchner y los expresidentes de Brasil y Uruguay convocados para la fecha.
Por su lado, Adolfo Pérez Esquivel, otra cara internacional de los derechos humanos, también celebró el premio que recibió. "Hoy estoy recibiendo esto, pero es un día semejante a hace 41 años cuando me otorgaron el Premio Nobel de la Paz", dijo Pérez Esquivel, y agradeció a la dupla presidencial y a las Madres de Plaza de Mayo. "Hasta la victoria siempre", cerró.
"Tenemos que festejar que llevamos 38 años de democracia ininterrumpida", destacó la Madre de Plaza de Mayo, Taty Almeida, la tercera en recibir la distinción por su larga trayectoria de lucha por los derechos humanos. "Recibir el premio Azucena Villaflor es muy fuerte, fue detenida desaparecida", subrayó.
También fueron distinguidos Hipólito Solari Yrigoyen, abogado defensor de políticos y militantes perseguidos; Dolores Sigampa de Demonty, integrante de Madres en Lucha Contra la Violencia Institucional; Pablo Torello, director de la película Historias de Aparecidos, y Lucila Larrandart, abogada, jueza y ex miembro de la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (CONADEP).
Críticas del arco opositor al acto en Plaza de Mayo
Desde el arco político opositor se pronunciaron duramente respecto a la movilización convocada por el Gobierno, como el flamante diputado nacional por la provincia de Buenos Aires, Diego Santilli, quien calificó de "show para la tribuna" a la convocatoria en medio de la coyuntura marcada por una crisis económica sin precedentes.
"La Argentina necesita menos actos políticos, más planificación y más gestión", enfatizó el exjefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Además, Santilli sostuvo en declaraciones televisivas que "una plaza llena no define el poder en la Argentina" sino que eso lo hicieron las elecciones, en donde se vio "el pedido de los argentinos al Gobierno" que resultó perdedor de los comicios, marcadas por la sociedad que evalúa la situación "a través de resultados".
Por otro lado, lamentó el timing del masivo acto político en medio de la pandemia de coronavirus, aludiendo a las víctimas que dejó el Covid-19 en el país.
En la misma línea se expresó Graciela Ocaña, también diputada nacional por el distrito mas grande y competitivo del país. "La pandemia preocupa en determinados días, y en otros no", dijo la flamante legisladora a radio Rivadavia.
Asimismo, Ocaña criticó que el festejo por la democracia se trate mas de una cuestión partidaria del Frente de Todos, a quienes acusó de utilizar la ocasión para dirimir sus conflictos internos.
"Aparte de que es un acto interno del Frente de Todos, que tiene como objetivo dirimir sus propias internas en el frente, tampoco se entiende qué es lo que festejan. Más allá de que todos festejamos la democracia", fustigó la dirigente opositora.
María Eugenia Vidal apuntó contra el costo del acto en Plaza de Mayo
Otra personalidad que se sumó a las críticas es María Eugenia Vidal pero desde el lado del gasto que implicó la organización del festejo que conmemora el 38 aniversario del orden democrático post dictadura, al que también calificó de "acto partidario" al igual que Santilli.
"Mientras que el 40% de los argentinos vive en la pobreza, el Gobierno gasta 40 millones de pesos en un acto partidario en la Plaza de Mayo", publicó en Twitter la diputada nacional por la Ciudad de Buenos Aires citando una nota de Clarín que afirma que ese sería el costo del acto del Gobierno que afrontaría el Estado y no el Frente de Todos por tratarse de un "acto institucional", a pesar de que tiene un claro tinte partidario.
"Más alejados de la realidad que nunca", concluyó la exgobernadora de la provincia de Buenos Aires.
Por su parte, el pasado jueves la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, había aclarado que el "Festival ciudadano" se trata de un acto institucional para conmemorar una fecha pública por lo que "los gastos corren por cuenta de la organización del acto".
"Es un acto institucional que tiene que ver con la celebración del Día de los Derechos Humanos y de la recuperación de la democracia. Está bueno que sea una tradición en la Argentina que celebremos después de que nos costó tanto recuperar la democracia", indicó Cerruti.