El intendente de Pinamar, Martín Yeza, fue imputado este viernes por la justicia federal en el marco de una denuncia por presunta malversación de caudales públicos, por una serie de obras en el Municipio que recibieron fondos del Estado nacional. Junto a Yeza fueron imputados funcionarios del Ministerio del Interior, Obras Públicas y Viviendas de la Nación. En tanto que el titular de esa cartera, Rogelio Frigerio, si bien fue denunciado, por el momento no quedó imputado.
No obstante, y según pudo saber PERFIL, el requerimiento de instrucción de la fiscal federal Paloma Ochoa dejó abierta la posibilidad de que, con el avance de la investigación, se formulen otras imputaciones. La semana próxima será la jueza Federal María Servini, quien decidirá si hace lugar al impulso de Ochoa o desiste de la apertura del expediente que tiene en la una serie de obras en la localidad balnearia.
La denuncia contra Yeza fue presentada el 28 de mayo pasado por el concejal del Municipio Gregorio Estanga y el diputado nacional, Rodolfo Tailhade, ambos miembros del Frente para la Victoria. “La investigación determinará que ocurrió con la mitad de los fondos que envió la Nación para la obra “Centralidad Pinamar”, si se destinaron a otro cosa o si fueron sustraídos, pero lo cierto es que en las obras del centro de la ciudad de Pinamar no están”, constaba en el escrito, presentado a fines de mayo pasado.
En diálogo con PERFIL, Yeza, que llegó al poder en diciembre de 2015, como representante de Cambiemos se mostró tranquilo. Detalló que ya se presentó espontáneamente ante la justicia cuando conoció la denuncia y entregó copia certificada del expediente de 800 fojas de la obra. En tanto que explicó que el jueves, la secretaria de Planeamiento del Municipio asistió al Concejo Deliberante de la Ciudad balnearia y explicó, durante casi tres horas, los detalles de las obras denunciadas. El intendente, una de las promesas de Cambiemos en territorio bonaerense, reiteró que está y estará a disposición de la justicia y afirmó que todos los mecanismos de control funcionaron en la supervisión de la obra.
En la presentación de Tailhade y Estanga se hizo referencia a que los hechos denunciados constituyen un “claro desvío” de fondos nacionales destinados a la construcción de una obra pública en Pinamar, con dinero aportado por el Ministerio del Interior, en el marco del Programa “Plan de renovación urbana”. Para Tailhade y Estanga, “la identidad política entre el ministro Frigerio y el intendente Yeza facilitó la posibilidad de que Pinamar pudiera obtener el financiamiento nacional”.
En el relato de los hechos se dio cuenta de que, el 26 de julio de 2017 la cartera conducida por Frigerio publicó el llamado a licitación denominado “Centralidad Pinamar”, para una obra en la avenida Bunge con un presupuesto de 33.925.024, 23 millones de pesos. Con la apertura de sobres se supo que la elegida era la constructora Ashoka, por un monto apenas menor, dividido en tres obras. Entre los detalles agregados estuvo que “los pagos nunca se atrasaban. Salían fácilmente al parecer sin necesidad de grandes reclamos o de conflictos tan habituales en la dinámica de la obra pública nacional”.
En la denuncia se mencionó también, “la facilidad con la que la firma Ashoka Construcciones S.A, a pesar de sus evidentes atrasos, pudo cobrar lo que no hacía”, habría permitido según los denunciantes que al 22 de diciembre llevara cobrado a esa altura 25.323.745 millones de pesos de los 33.5858.235,03 por los que se le adjudicó la obra”.
En tanto que resaltaron que “las irregularidades se repiten de manera sistemática indicando una evidente adulteración de los conceptos y contenidos de los certificados, todo ello con la evidente complicidad de funcionarios municipales, cuya intervención era imprescindible para la liberación de los fondos”.