Justicia Legítima, la agrupación judicial afín al kirchnerismo, salió al cruce de las declaraciones del exfiscal Julio César Strassera quién al celebrar la restitución de José María Campagnoli señaló a esa facción como "una banda" destinada a "favorecer la impunidad de los funcionarios". Para la agrupación, las declaraciones del exfuncionario "son parte de una campaña difamatoria".
La frase que irritó a la organización judicial K fue la que vinculó el proceso a Campagnoli con el accionar de los militares, en épocas de gobierno defacto. "Ni la dictadura se atrevió a tanto", había dicho el fiscal federal quién habló de una "persecución" al fiscal por investigar a Lázaro Báez.
La respuesta por parte de la agrupación que integra la procuradora Alejandra Gils Carbó no tardó en llegar: señalaron que las declaraciones del exfiscal "son parte de una campaña difamatoria" para "desmerecer a quienes nos atrevimos a cuestionar el espíritu corporativo" de la Justicia.
Mediante un comunicado, Justicia Legítima se despachó contra Strassera: "El exfiscal sabe que el terrorismo de estado sólo fue posible con la complicidad de quienes, entre otras cosas, rechazaron sistemáticamente hábeas corpus como aporte fundamental al plan criminal, y los magistrados incómodos al régimen eran removidos de un plumazo".
"Muy por el contrario el caso Campagnoli es un testimonio cabal del funcionamiento de las instituciones democráticas y de la altísima responsabilidad de los miembros del tribunal de enjuiciamiento de magistrados de decidir sobre las potestades, limitaciones y estándar de fiscal que es razonable en una democracia", señalaron.
Por último, dijeron tener "las manos limpias" a la hora de reclamar "cambios impostergables en el Poder Judicial" que se correspondan con un "nuevo proceso histórico".