No solo UNEN vive momentos de interna feroz. En el Frente Renovador pasa lo mismo por la pelea para saber quien será el candidato a gobernador de Buenos Aires. La indecisión de Martín Insaurralde potencia cada vez más a los otros postulantes. Uno de ellos es el intendente de San Isidro, Gustavo Posse.
El radical que supo irse en 2013 con el PRO para luego sellar una alianza con Sergio Massa está molesto por la oposición que le hacen en su distrito los familiares del diputado: Sebastián Galmarini, cuñado de Massa y diputado provincial del espacio suele criticar su gestión, lo mismo que Marcela Durrieu, su suegra, actual concejal y la primera en levantar la mano a la hora de declaraciones explosivas. En el entorno del intendente creen que el problema es de Massa.
Posse jugó sus cartas por estos días. Mandó a su hermano, Mario, a candidatearse en San Fernando. ¿Quién gobierna allí? Luis Andreotti, también massista. ”Vemos que hay un déficit en la gestión que se viene llevando adelante desde 2011”, dijo. Todo muy cordial.
En Morón el intendente Lucas Ghi está obsesionado por los números de la campaña. A tal punto que el domingo corrió una maratón solidaria pero en medio de la misma se acercó a uno de sus funcionarios para preguntarle si ya había llegado la nueva medición de Daniel Scioli en las encuestas: "23", respondió en seco su asesor. El número no era bueno. Ghi se limitó a agachar la cabeza y a seguir corriendo.
Ese distrito está que arde en términos de rosca. Por el lado del kirchnerismo, el candidato es Hernán Sabbatella, hermano del titular del AFSCA, Martín. Ghi tiene mejor imagen, pero debió aceptar la decisión del caballo de batalla para la Ley de Medios.
Y el otro con chances es el candidato del FR, Martín Marinucci. En otro capítulo de salto de garrocha, el ahora massista fue candidato K en 2011 con la misma boleta que Ghi. Pero en 2013 encabezó la lista concejales de Massa y ganó la elección compartiendo lista con Ramiro Tagliaferro, marido de Mauria Eugenia Vidal, candidata a gobernadora del PRO. Ah, este último ya se pasó al partido de Mauricio Macri.
El jefe de gobierno porteño sabe que no puede perder mucho más tiempo para elegir sucesor en la Ciudad. Horacio Rodríguez Larreta o Gabriela Michetti. La senadora estuvo de viaje en París para visitar a su hermana menor y a su hijo que estudia en esa ciudad. A principios de semana volvió y ahora debe decidir que hacer: si acompaña a Macri en la fórmula presidencial o juega en la Capital. Tiene un problema y es que ya le dijo que no a su jefe político cuando le pidió ser candidata en Buenos Aires. ¿Podrá otra vez desencantarlo? Los operadores de Larreta desean que libere el camino.
Por último, dos buenas noticias. El senador Adolfo Rodríguez Saá se recupera favorablemente de la operación de corazón que se le practicaron hace unas semanas. Si bien se complicó el post operatorio ya descansa en su departamento de Recoleta. Lo mismo para el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, quien se repuso de una neumonía que lo tuvo a maltraer durante semanas. Fuera de la agenda, volvió con todo a la campaña de paso por su pago chico, Chacabuco.
(*) De la redacción de Perfil.com.