El presidente Mauricio Macri iniciará su gestión al frente del Ejecutivo con reuniones privadas con sus rivales en las elecciones. El jefe de Estado había adelantado durante la campaña que en el caso de llegar al sillón de Rivadavia quería dialogar con el resto de candidatos para conseguir llegar a resoluciones consensuadas entre todos los representantes políticos.
Es un gesto pero a la vez una necesidad para asegurarse un apoyo a las medidas que quiere impulsar en el Congreso, dado que no cuenta en ninguna de las dos cámaras con quórum suficiente. En esa misma línea, se reunirá mañana a las 12 con los gobernadores para almorzar.
Macri arrancará la jornada con una audiencia privada a las 10.30 horas con el ex candidato presidencial del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, en la Casa Rosada. Tras ese encuentro, Macri asistirá a las 11.30 horas a una invocación religiosa por el inicio de su mandato presidida por el arzobispo de la Ciudad de Buenos Aires, el cardenal Mario Poli. Del oficio también participará el gabinete de ministros macrista.
A las 15, el jefe de Estado se reunirá con el líder del Frente Renovador, Sergio Massa, para "charlar sobre la agenda de la Argentina que se viene", según informó el ex intendente de Tigre. A ellos se les unirá el ministro del Interior, Rogelio Frigerio.
A las 17 de la tarde será el turno del ex candidato por Compromiso Federal, Adolfo Rodríguez Saá quien aseguró ayer en la gala del Colón que “le encanta contribuir” al proyecto de “pobreza cero” del que el mandatario habló tras jurar en el Congreso.
Macri también espera reunirse con la ex postulante de Progresistas, Margarita Stolbizer, con quien no coordinó el horario aún. Según indicó en diálogo con radio la Red la líder del GEN, "confirmaremos el horario por la mañana y seguramente nos reuniremos por la tarde".
Por su parte, el ex candidato del Frente de Izquierda, Nicolás del Caño, adelantó que no va a dialogar con el flamante presidente al considerar que el jefe de Estado quiere impulsar un ajuste económico que perjudicará el poder adquisitivo de la clase trabajadora. "Nosotros no queremos dar una imagen falsa, nosotros no podemos aportar a algo que desde el vamos estamos en desacuerdo. Es impracticable", sentenció el diputado nacional.