Milei insistió con la dolarización y el fin del Banco Central si llega a la presidencia

El menú de Javier Milei para el debate presidencial de este domingo a la noche fue simple y concreto y por momentos lo pudo llevar a cabo, aunque con ciertas dificultades por la falta de sus papeles ayuda memoria. Intentó, con tono moderado, enseñar propuestas, rechazó cuestiones que había planteado en entrevistas, como romper relaciones con socios comerciales de la Argentina como Brasil y China, y recargó críticas contra Sergio Massa, chicanas incluidas, cuestionando lo que él denomina “campaña del miedo”.

Desde el primer minuto, el libertario, con calma, explicó sus condiciones para ser presidente, con énfasis en sus conocimientos de economía, y soltó su slogan de campaña: “es imposible cambiar la realidad haciendo las mismas cosas y una Argentina distinta es imposible con los mismos de siempre". Pero no pudo contenerse en el primer tramo del intercambio cuando su rival lo apuró con preguntas concretas, que requerían respuestas por si o por no.

En ese lapso, el economista perdió el equilibrio y se enojó, con una frase contra el tigrense: “No me vas a condicionar las respuestas”. Ante la acusación de violencia por parte del ministro, el legislador contestó: “Dejá de mentir, no te agredí, expreso con pasión la indignación que genera tu gobierno”. Sin dudas, fue uno de los puntos más flojos de la intervención del hombre de La Libertad Avanza a lo largo del intercambio.

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Por otro lado, el libertario contó con contradicciones: en entrevistas en plena campaña, habló en contra de los subsidios a servicios públicos y criticó al Papa Francisco. Incluso fue parte de la agenda pública la frase contra el Vaticano de Alberto Benegas Lynch, referente del liberalismo, en el cierre de actividades proselitistas. Massa lo recordó cuando puedo y Milei se mostró arrepentido, y dijo que no va a haber recorte de subsidios.

Contragolpeó, chicanas mediante, señalando que el titular de Hacienda “es flojo” al momento de hacer números y, sin criticar a Margaret Tatcher, se comprometió a hacer esfuerzos diplomáticos para recuperar las Islas Malvinas. Bajo ese marco, mencionó que no piensa quebrar relaciones con los principales socios comerciales de la Argentina, China y Brasil.

También, el diputado nacional apuntó que no tiene entre sus planes arancelar universidades públicas. “Una de las cosas que quiero aclarar es que la salud y la educación van a seguir siendo públicas. Para nosotros la educación y la salud es sumamente importante y por eso hemos desarrollado la idea del capital humano, con cuatro secretarías: niñez y familia, salud, educación e inserción en el mercado de trabajo”, lanzó.

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Al momento de hablar de su agenda económica, el representante de LLA volvió a ratificar que la llevará adelante, con la eliminación del Banco Central y la dolarización incluidas, pese a que esas ideas son resistidas por Mauricio Macri.

Por momentos, sin machetes en la mano, a Milei le costó hilvanar ciertas ideas y destinó buena parte de su tiempo en responder criticas de su contrincante y no en recargar cuestionamientos al Gobierno nacional.

Y en el cierre, cuando habló sobre por qué pretende ser jefe de Estado, volvió a señalar que el oficialismo llevó adelante una campaña “del miedo”. “En el fondo te estoy preguntando si queres elegir entre el populismo que nos hunde y la república. Lo que sí te pido, es que cuando vayas a votar lo hagas sin miedo porque el miedo paraliza y si te paralizas beneficias al status quo, ese que nos empobrece, por ende venimos a ofrecerte el modelo de la libertad, que donde se aplica los países son 8 veces mas ricos que los reprimidos, los pobres están muchísimo mejor que en el 90% de los países reprimidos, la gente vive un 20% mas. Quiero que tengas una luz de esperanza, existe una Argentina mejor pero esa Argentina mejor solo es posible si es liberal”.

cp