A casi tres años de la muerte del fiscal que denunció a la entonces presidenta Cristina Kirchner, Alberto Nisman, la investigación sobre su deceso aún está lejos de cerrarse, pero volvió a moverse.
La fiscalía encargada de investigar el fallecimiento del funcionario judicial recibió una respuesta positiva de parte de Estados Unidos ante un pedido de colaboración y llegó un primer adelanto.
Según los primeros datos aportados, el 18 de enero de 2015 se recibió una “explosión de llamados” de agentes de inteligencia argentinos a aquel país. De todas formas, hasta ahora, el único preso es Diego Lagomarsino, el último hombre que lo habría visto con vida.
Además, en las últimas semanas, Estados Unidos dio luz verde a un pedido de informes que hizo el fiscal Eduardo Taiano sobre la información contenida en dos correos electrónicos utilizados por Nisman.
Una de las cuentas es la que usaba el fiscal, [email protected], y el otro es una cuenta que generó sospechas por el movimiento que tuvo: es aquella conocida como [email protected].
Este último correo electrónico es el que se dejó como referencia de contacto en el formulario que Nisman y su familia llenaron en una cuenta bancaria, en la cual Lagomarsino aparece como titular, en el Meryl Lynch de Estados Unidos.
