Elia Espen, Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora, acompañó a los trabajadores de Lear en sus protestas en la Panamericana. Allí, junto con la nieta recuperada, Victoria Moyano, estuvo a metros del secretario de Seguridad, Sergio Berni.
En diálogo con Ahora es Nuestra la Ciudad, Espen dijo que tuvo una sensación rara "entre la sonrisa y la bronca, lo miraba y me preguntaba si puede ser posible, en esta época, que puedan existir tipos como éste". Para la Madre de Plaza de Mayo lo que hace Berni "está avalado por la Presidenta y por gente del Gobierno, porque si no, no podría actuar como actúa".
Todos vimos, explicó la mujer, "cuando el gendarme se tiró al piso" pero "te das cuenta que los gendarmes están esperando atacar, falta una pequeña orden para que se larguen con todo" y agregó que "en la Panamericana eran una cantidad tremenda y nos triplicaban la cantidad que éramos nosotros". Espen dijo que lo del gendarme carancho es "como Astiz con ciertas diferencias pero me hace acordar la época de la dictadura cuando gendarmería te revisaba en los colectivos, te manoseaban, te atacaban y todo esto me vuelve un poco a esa época".
En diálogo con FM Identidad, la Madre de Plaza de Mayo dijo que "el gobierno se derechizó" y "no tenes derecho a pensar ni a hablar siquiera, por eso somos reprimidos totalmente". "O pensas como gente del gobierno o te reprimen". Espen dijo que jamás la invitaron a programas como 678 porque "saben muy bien lo que digo, y soy crítica porque quisiera que la Presidenta cambiara y se fijaran en todo lo que está pasando y tomaran posición por la gente que sufre y por los trabajadores".
Espen explicó que tuvo problemas "por decir lo que pienso" pero que seguirá ejerciendo su libertad: "Me han acusado de cualquier cosa pero no me interesa". Pero "le pido a la Presidenta que baje los decibeles y observe que, no como ellos dicen, hay hambre y falta trabajo". Pidió que "Cristina no le de esa soltura para hacer lo que se le da la gana a Berni". Para la Madre "Berni no tendría que estar, no tendría que haber represión".
Concluyó que "este no es el gobierno de los derechos humanos sino más dictador que otra cosa" y que el sistema de inteligencia que montó el kirchnerismo difícilmente "se vuelva atrás cuando ya es ley por la ley antiterrorista y el proyecto X" cuando deje Cristina el poder.