Mientras continúa la controversia en torno a las denuncias cruzadas que derivaron del escándalo protagonizado por el vicepresidente Amado Boudou, la renuncia del Procurador General de la Nación, Esteban Righi, se convirtió no sólo en una de las primeras esquirlas de la causa, sino en un gesto indirecto de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, al elegir a uno de los hombres más cercanos al vicepresidente para proponerlo como posible reemplazante de Righi. Con ello, la atención estará centrada en Daniel Reposo, titular de la Sindicatura General de la Nación (SIGEN), hasta que el Senado avale o rechace su nueva designación.
Luego de la renuncia de Esteban Righi al puesto que ocupaba desde hace ocho años, la Presidenta propuso al titular de la Sindicatura General de la Nación (SIGEN), según se informó en forma oficial, en medio de las denuncias contra Boudou por el supuesto tráfico de influencias a favor de la ex imprenta Ciccone Calcográfica. En noviembre de 2009, el ex ministro de Economía había logrado colocar a Reposo como titular de la SIGEN, órgano de control interno del Poder Ejecutivo.
Reposo es abogado laboralista y, según se define a sí mismo en su cuenta de Twitter, es "ex-gerente de Prestaciones Anses, laboralista, veroniquense, peronista K y amante del golf".
Entre 1986 y 1992 se desempeñó en la Sindicatura General de empresas públicas y al año siguiente, fue subgerente institucional de la Sindicatura General de la Nación. Desde 2007 al 2009 fue gerente de Prestaciones de la ANSeS y luego fue titular de la Unidad de Auditoría Interna.
Actualmente, Reposo es síndico titular en Papel Prensa. Uno de sus roles más recordados es el de haber tapado las cámaras que grababan una asamblea de directorio, luego de que el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, interviniera la empresa y apareciera con guantes de box, impidiendo la votación.
En otra oportunidad, el funcionario apuntaló una Asamblea en la que se pretendió designar a la SIGEN como auditor externo de Papel Prensa, porque no convalidaba el estudio de auditores que había sido designado formalmente en la asamblea original. Por ambos episodios, Reposo fue denunciado penalmente por los accionistas privados de Papel Prensa, recordó la agencia DyN.
Pendiente de aprobación. Ahora, tras ser designado por la Presidenta, Reposo deberá pasar por un proceso de selección que instaló Néstor Kirchner en junio del 2003. Producida la vacante, el nombre y los antecedentes del reemplazante propuesto por la Casa de Gobierno se publicará en el Boletín Oficial y en dos diarios nacionales durante tres días.
Durante quince días, asociaciones civiles, académicas y de derechos humanos podrán presentar apoyos y objeciones a la persona elegida para el cargo, y, de no haber impugnaciones, el Poder Ejecutivo tiene otros quince días para elevar al Senado al candidato.
La Cámara Alta deberá realizar una audiencia pública con el postulante y en el pleno del recinto se necesitarán los dos tercios de los votos para aprobar la designación. En ese período, Reposo deberá presentar una declaración jurada con sus bienes, los de su cónyuge y los de sus hijos, además de las asociaciones civiles y comerciales, los estudios de abogados que integró en los últimos ocho años y "cualquier tipo de compromiso que pueda afectar la imparcialidad de su criterio".