“A mí no me la contaron, yo vi todo con mis propios ojos”. La que habla es la diputada nacional Silvia Vázquez, una aliada del gobierno kirchnerista, que está en colonia La Primavera, Formosa, acompañando a los aborígenes Toba que fueron reprimidos por la policía provincial el martes pasado, en un hecho que provocó dos muertes. Desde allí, en diálogo con Perfil.com, Vázquez cargó contra el gobernador ultrakirchnerista que esta mañana culpó a los opositores por “sembrar odios” y los responsabilizó por lo ocurrido.
“El odio lo siembra Insfrán, que no puede decir que soy una diputada opositora porque me siento representativa del ideario de Néstor Kirchner”, afirmó la aliada K en la Cámara Baja, que le pidió a respuestas a los problemas de los tobas. “Que el gobernador salga a decir algo y no sea algo que remedie la situación es mas que lamentable”, sostuvo la mujer que el sábado participó de una asamblea en la colonia aborigen el último sábado.
Vázquez vivió en carne propia la represión del martes 23, en la que murieron dos personas en situaciones que aún se tratan de dilucidar. “Yo estaba ahí cuando empezaron a disparar en medio de la nada, a mí no me la contaron, vi todo con su propios ojos”, confió la legisladora nacional, que retrató cómo quedaron los cuerpos y rostros de los indígenas que protestaba en la ruta por tierras, agua potable, comida y mejoras sanitarias.
Las imágenes que tomó la diputada con su propio celular son contundentes: hombres y mujeres con balazos de goma en la cara, moretones por todos lados; agua contaminada que beben a diario y ausencia del Estado para atenderlos. “Están todos enfermos por el agua que toman y no habíamos conseguido un médico para atender a los 36 heridos”, relató (vea la galería de imágenes).
"Genocidio" formoseño. La presencia de Vázquez en Formosa despertó algunos rumores. Se decía que había sido enviada por el Gobierno y que había tenido contactos con Gildo Insfrán. Ella lo niega de forma rotunda: “No habló con ningún genocida y Gildo Insfrán es un genocida”, denunció. “No tengo ningún interes en tener ningún tipo de contacto con él, lo único que se respira en Formosa es miedo, cualquier que no piensa como el se siente perseguido y atemorizado”, añadió.
“No quiero que él [Insfrán] trate de embarrar el tema, esta es una causa de Derechos Humanos, no se lo acusa por sus ideas políticas”, expresó la diputada de FORJA, quien explicó que “en Formosa existe una manera naturalizada de discriminación por razones políticas y étnica”. Y reafirmó que el gobernador debe responder por los crímenes de tobas. “El que está sentado en el banquillo de los acusados es Gildo, por eso quiere embarrar la cancha”.
La dirigente de la Concertación, que es autora de la ley de Reparación Histórica de los pueblos originarios, adelantó a Perfil.com que le pedirá a la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner que reciba a solas a Félix Díaz, dirigente toba y funcionario del INADI que fue protagonista de los incidentes.
Silencio K. Días después de la represión, CFK e Insfrán mantuvieron una teleconferencia durante la inauguración del tendido eléctrico NOA-NEA y nada dijeron del trágico episodio, sólo hubo elogios entre ambos y un emotivo recuerdo al ex mandatario Néstor Kirchner.
Al ser consultada por esta llamativa omisión en el discurso presidencial, Vázquez prefirió no opinar: “Eso tendrían que preguntárselo a la Presidenta; yo confío en que dará respuesta al reclamo de los habitante de colonia La Primavera”.