La crisis cambiaria suscitó una serie de reclamos desde fuera y dentro del oficialismo al presidente Mauricio Macri. La inestabilidad en la economía de las últimas semanas y la decisión de pedir un préstamo al Fondo Monetario Internacional pusieron en duda el sistema actual de multiplicidad de ministros para dirigir el ala económica y empezaron a tomar fuerza las voces que pedían un “hombre fuerte” a cargo de ese área.
La respuesta de Macri no se hizo esperar. El jefe de Estado informó a su mesa chica que a partir de mañana el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne será el encargado de coordinar todo el equipo económico. Es decir, que los ministerios de Finanzas, Transporte, Trabajo, Interior, Producción, Agroindustria, Energía, Turismo y Modernización pasarán a estar bajo su órbita.
Así le confirmó una alta fuente del Gobierno al diario La Nación. Este cambio tiene lugar en pleno avance de las negociaciones con el FMI por el préstamo de uS$ 30 millones. Precisamente Dujovne es quien lidera las reuniones por su relación cercana con la titular de la entidad, Christine Lagarde.
Esta decisión presidencial es vista como una derrota de Marcos Peña, quien además de ceder poder esta semana con la ampliación del “ala política” en la mesa chica, verá ahora como sus dos vicejefes, Mario Quintana y Gustavo Lopetegui, quedan relegados en la toma de decisiones.
Antes, Quintana y Lopetegui eran los encargados de definir si se avanzaba o no a los pedidos de los fondos, una responsabilidad que ahora asumirá Dujovne. Algo que hace unas semanas era impensado en la Casa Rosada.