Tal vez traicionado por su inconsciente o por las tribulaciones que lo aquejan por estos días, el jefe de Gabinete Aníbal Fernández cometió un polémico fallido ante los empresarios que se congregaron en el Alvear Palace Hotel en el marco del Council of the Americas de este año.
En momentos en que cuestionaba el tratamiento que realizan algunos medios de comunicación sobre sus declaraciones, Aníbal F. lanzó un furcio que luego fue una de las cosas más comentadas por los empresarios, a pesar de las intenciones del candidato a gobernador por la provincia de Buenos Aires para volver a captar la atención de los asistentes.
Ya algo distraído, comenzó por explicar: "Soy un acérrimo defensor de la... siembra directa".
Y siguió: "No es lo mismo en un terreno, en un campo donde tenemos entre 800 y 1000 milímetros cúbicos como régimen conocido, tener una dro.., una..., eh..., soja de última generación".
Es una posibilidad que el jefe de Gabinete haya estado pensando en la causa que se desarrollaba por esos momentos en Tribunales respecto de la denuncia ampliada de Martin Lanatta, condenado por el Triple Crimen de General Rodríguez.
Horas previas a su discurso frente a los empresarios del Council of the Americas, Fernández sostuvo que a Lanatta "le han comprado la lengua" y, por tanto, no le "mueve el amperímetro" la ratificación judicial que hizo ayer el recluso, para vincularlo nuevamente en el triple crimen de General Rodríguez.
Lanatta ratificó y amplió ante el fiscal federal Gerardo Pollicita y la jueza María Servini de Cubría la acusación que había hecho en su contra una semana antes de las PASO, en el sentido de que Fernández sería el personaje llamado “La Morsa" en la causa por el tráfico de efedrina.