Con las típicas fotos “ejemplificadoras”, donde el gobernador Axel Kicillof y el ministro Daniel Gollán posaron “poniéndole el brazo a la aguja”, la provincia de Buenos Aires redobló esta semana sus esfuerzos para avanzar en su ambicioso plan de vacunación. El propósito es intentar proteger -con la Sputnik V- a los grupos de riesgo: “son alrededor de 5.700.000 personas que tienen más posibilidades de enfermarse”, detalló el responsable provincial de la salud durante la presentación del Programa. Y desde esta semana ese grupo incluye a los mayores de 60 años. De hecho, Gollán (65) fue el primero de este grupo en recibirla, tras la aprobación que dio la Anmat. Eso si, para poder avanzar la campaña, se necesitará de la llegada puntual de nuevas dosis que deberían comenzarán a arribar a bordo de aviones de Aerolíneas Argentinas desde el martes próximo.
El “Buenos Aires Vacunate” es un plan “público, gratuito y optativo”. Este último punto es uno de los más llamativos. Y es que implica que a las 600 postas de vacunación provincial simultaneas llegarán, por ahora, básicamente voluntarios. De hecho, según detalló el gobernador Kicillof, “hasta ahora ya hay un millón de preinscriptos que se registraron en el sitio www.vacunatepba.gba.gob”. Y agregó: el objetivo es lograr que se anoten los grupos de mayor riesgo”.
Para poder llegar a millones de vacunados, el plan -que se detalla en la página web del ministerio-, está intentando sumar a los sindicatos. De hecho, Gollán presentó los lineamientos centrales junto a su colega de trabajo y frente a representantes gremiales de una cincuentena de sindicatos pertenecientes a la CGT y ambas CTAs.
El esquema del “VacunatePBA” tiene como el objetivo central vacunar a toda la población mayor de 18 años. En esta primera etapa se priorizará a los grupos con mayor vulnerabilidad frente al virus: mayores de 60 años, personal de salud, personal de seguridad, docentes y auxiliares y personas de 18 a 59 años con comorbilidades (EPOC, diabetes, obesidad, etc).
Y, justamente, para poder ampliar la cantidad de gente protegida con la Sputnik V, el viceministro de salud Nicolás Kreplak recordó que la logística de los próximos meses será compleja. Y para superar el desafío apeló al trabajo conjunto con los sindicatos para que “todos los mayores de 18 años de la provincia estén registrados para vacunarse”. Según Kreplak:”hoy llegamos al millón, pero necesitamos tener identificados a los 12 millones que queremos vacunar”.
Con la idea de ordenar la demanda que prevén creciente, el plan se organiza alrededor de un gestor de turnos para que el proceso de vacunación sea ágil mientras minimiza cualquier riesgo de aglomeración de gente. “En esta etapa, para poder acceder a la vacuna los requisitos imprescindibles son tener entre 18 y 59 años y acreditar enfermedades preexistentes; o bien ser mayor de 60 años o trabajar como personal de salud, policial o docente”, explicaron desde el ministerio provincial.
Merkel y Putin podrían aunar esfuerzos
En una de las tantas conferencias de prensa que brindan los responsables de la comercialización de la vacuna Sputnik V, esta semana se conoció que las autoridades de Alemania y de Rusia están explorando las posibilidades de que la industria alemana colabore para acelerar la producción de dosis de la vacuna rusa.
Según Kirill Dmitriev, CEO del Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF), “estamos hablando sobre como podría colaborar Alemania en la producción de la Sputnik V”. Y agregó que “en una charla telefónica mantenida por Angela Merkel y Vladimir Putin se toco ese tema”. Los rusos dieron a entender que Merkel ofreció a los profesionales alemanes que trabajan en el prestigioso Instituto de virología “Paul Ehrlich” para colaborar con los científicos rusos y facilitar la aprobación de uso de emergencia de la vacuna por parte de la Agencia Europea de Medicamentos. Pero Merkel también aclaró que “luego de que la vacuna sea aprobada en Europa, podremos seguir hablando de producción y aplicación”.