El Primavera Sound es un festival que puso a la música como prioridad. Detrás de esa apuesta, que podría sonar demagógica y genérica, hay una ética sonora real: año a año, en esa celebración de la estética alternativa surgida en Barcelona en 2001, radica una perspectiva que antepone el criterio musical al métrico y que posicionó al festival como una de las más importantes citas internacionales para los amantes de la música. Perfil habló con Joan Pons, director de comunicación de Primavera Sound; y con Matías Loizaga, director de entretenimiento de Pop Art Music, quien fue uno de los responsables de la artística de la edición 2023, que será en noviembre próximo.
–¿Joan, cómo definirías al Primavera Sound?
–Es el festival para los amantes de la música. Me preguntarás: ¿Pero acaso no lo son todos los festivales?. Yo creo que no. Hay festivales que quieren vender una experiencia, moda, ocio, diversión…Nosotros tenemos todo eso pero lo que nos diferencia del resto de los festivales, es que el nuestro lo montaron cuatro amigos para atraer a grupos que de otra manera no hubieran vendido a tocar a Barcelona. Y artistas y público lo notan. Somos unos apasionados de nuestro trabajo y de la música; somos curiosos de nuevos géneros y nuestra grilla (line up ) funciona bastante a contracorriente del algoritmo.
–¿Cuán difícil es conciliar lo que es popular con los gustos personales?
Joan Pons: Si hacés el cartel de un festival como el Primavera Sound sin fijarte en el número de seguidores en redes sociales o en las escuchas de Spotify, sino que incluyes lo que te gusta, es te gusta da igual si es muy popular o no lo es. Nosotros no discriminamos, pensamos en lo que nos gusta, no hay letra pequeña.
Matías Loizaga: Es muy desafiante, me encanta hacerlo. Se trata de darle la oportunidad a la gente de que vea a leyendas como Robert Smith o Damon Albarn, que son genios vivientes que, con sus bandas y proyectos, son únicos. Y la idea es que eso conviva con artistas menos conocidos. Intentamos dar la batalla por esta cultura alternativa, si se quiere, donde importa menos el mainstream, y aunque atendemos el gusto popular, lo prioritario es la excelencia musical y que eso marque la diferencia.
–¿Cómo sería line up de un festival perfecto?
–Una vez nos pusimos a imaginar eso y sería así: tienes que ver a un artista que hace mucho que querías ver; luego, descubrir a tu nuevo grupo favorito, y este abre la puerta a esos artistas que no conocés; después, ver algo que te plantee un reto. Por último, algo que simplemente te genere disfrute; ahí entraría la parte más bailable, digamos. Con estas cuatro categorías, te vas a casa contento; viviste un festival.
–¿Matías; qué sensaciones te produce mirar la grilla que armaron para este Primavera Sound?
–Estoy super contento con la grilla en general. Es una buena foto para los fanáticos de la música, las melodías, las canciones y los conciertos en vivo épicos, que quedan en la historia. No soy amigo de rotular con géneros pero tener a The Cure y a Blur, mezclados con Slowdive y Domi y JD Beck es realmente un lujo improbable.
Cómo es line up 2023 del Primavera Sound.
–Joan, es interesante lo que está pasando con los artistas argentinos en España. ¿Qué impacto tiene eso en la posibilidad de sacar de Europa al festival?
–Forma parte de la idea original de hacer Primavera en América Latina. Siempre que se pueda, la idea es hacer una carretera en dos direcciones. Si vemos artistas locales que nos gustan y cuyas performances en directo nos convencen, solemos invitarlas. Lograr que estos festivales puedan salir de Europa de una manera que no sea unilateral, es uno de nuestros sueños y objetivos.
EI