PROTAGONISTAS
Su fortuna: US$ 1,7 mil millones

Rihanna se convirtió en una ‘billion dollar lady’, según ‘Forbes’

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Diva pop. A los 33 años, Rihanna no se hizo rica con lo que genera como cantante. Sus mayores ingresos son por sus empresas de cosmética y de lencería. Para lanzar ambas compañías se asoció con el grupo de lujo mundial LVMH. | afp

La cantante de Barbados se subió a un nuevo podio. Según Forbes, la biblia económica que arma los rankings de multimillonarios, sumó a Rihanna a ese grupo. Y esa publicación la consagró oficialmente la artista musical femenina más rica del mundo. A los 33 años, esta diva pop tiene una fortuna de 1,7 mil millones de dólares. Sea por los cambios en el consumo de la música o por la pandemia que hizo que durante 2020 las giras se suspendieron por razones obvias, el ingreso más importante que posicionó a Rihanna en ese podio proviene de Fanty Beauty, su empresa de cosméticos. En el informe de Forbes, un estimado de 1,4 mil millones de dólares lo genera esa compañía.  Unos 270 millones adicionales son por Savage x Fenty –su empresa de lencería–, y el resto por las ganancias que obtiene por la música, los shows y algunas actuaciones como actriz. Esa cifra la ubica en segundo lugar de las mujeres del mundo del espectáculo más ricas; la primera es Oprah Winfrey, con 2,7 mil millones de dólares.

Por la pandemia, Rihanna cierra su línea de ropa de lujo que lanzó en 2019

El rubro de la cosmética parece reportar interesantes dividendos a algunas celebridades. Por ejemplo, Kim Kardashian y su hermana Kylie Jenner superaron respectivamente los mil millones de dólares con sendas compañías de belleza; y en el caso de Kim sumó también la de ropa interior. 

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En el caso de Rihanna, cuyo nombre verdadero es Robyn Fenty, el lanzamiento de Fenty Beauty lo hizo con un socio más que poderoso, el grupo de marcas de lujo mundial Louis Vuitton Moët-Hennessy. Y enseguida comprobaron el poder de Rihanna como generadora de tendencia: su línea de belleza “para toda mujer” tenía 40 tonos de bases, algo que hizo que la competencia ampliara su oferta de bases. Lo único que no funcionó de Rihanna fue la línea de ropa y a los dos años acordó con LVMH cerrarla.