Rusia neutralizó drones ucranianos sobre Moscú. Uno impactó cerca del ministerio Defensa. Hubo bombardeos en Crimea y en la región de Odesa, en el sur de Ucrania.
En una operación especial, Kiev respondió a los ataques en Odesa del pasado fin de semana, que causaron dos muertos y destruyeron una catedral.
En Crimea, los vehículos no tripulados alcanzaron un depósito de municiones, en el norte de la península. El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski prometió represalias.
Casi 50 edificios resultaron dañados. El centro histórico es patrimonio mundial de la Unesco, que manifestó su enojo. La Catedral, del siglo 18, fue demolida en tiempos e Stalin en 1936 y reconstruida en la década del 90, tras la caída de la Unión Soviética.
Moscú responsabilizó a las defensas aéreas de Kiev y dijo haber atacado instalaciones donde se preparaban actos terroristas contra Rusia, algo que negaron los vecinos.
La incursión se produjo antes de la reunión, en San Petersburgo, de Putin y su homólogo y aliado bielorruso Lukashenko, quienes menospreciaron la contraofensiva ucraniana emprendida a comienzos de junio.
Se trata del primer encuentro desde que Bielorrusia medió para poner fin al motín de los mercenarios del grupo Wagner en Rusia, hace cuatro semanas.
