Chaco se consolidó como la tercera provincia con más infectados por Covid-19. Tiene 640 enfermos y 35 muertos. Si bien es la décima provincia en el ranking de habitantes, en la lista de contagios figura tercera. Se ubica sólo por detrás de dos gigantes, como la Capital y la provincia de Buenos Aires. En los últimos días se aceleró la curva de enfermos, especialmente en el área Gran Toba, en las afueras de Resistencia.
Se trata de un asentamiento que nuclea seis barrios, donde viven comunidades indígenas. El hacinamiento y el hermetismo cultural de los habitantes potencia las dificultades para contener los expansión del Covid 19. La oposición al gobernador Jorge Capitanich agrega que la intervención estatal fue tardía. Con los matices y particularidades chaqueñas, la situación se parece a la de la ciudad de Buenos Aires, con el avance de la enfermedad en las villas.
Capitanich reconoció el problema hoy a la mañana Lo hizo durante la inauguración de las refacciones en el hospital Luis Fleitas de Fontana. El gobernador afirmó que la disparada se dio a partir de tres casos. “El 24 y el 28 de febrero, que presentaron síntomas a partir del 4 de marzo; otro el 9 de marzo, con multiplicación a raíz de contactos estrechos y ahora la referida al barrio Gran Toba”.
El hacinamiento y el hermetismo de los habitantes potencia las dificultades para contener los expansión del Covid 19. Y la oposición agrega que la intervención estatal fue tardía
El gobernador agregó otro dato que se repite en muchas provincias: los contagios entre trabajadores de salud. “Además 193 casos salieron del sistema sanitario”, planteó Capitanich. Alrededor de un 25% de los infectados está vinculado a médicos y enfermeros
Según los datos provinciales más recientes, en el Gran Toba se acumulan 109 contagios, con diez muertos. Esa zona está conformada por los barrios Toba, Cheliyí, Camalote, Crescencio López, América y Cotap. Lo habitan unas 4.000 personas, principalmente integrantes de la etnia Qom. Ahí abunda un menú variopinto de enfermedades, endogamia, amuchamiento y población envejecida: hay hipertensos, pacientes oncológicos, otros con chagas, dengue, diabetes, bajo peso o malnutrición, y una gran cantidad de ancianos.
De los 640 pacientes confirmados en el parte chaqueño de hoy, 34 se encuentran internados; y hay seis en estado grave. Además de 35 muertes, al momento se registran 284 altas, sobre un total de 4938 muestras.
Esa zona de los suburbios de la capital provincial está conformada por los barrios Toba, Cheliyí, Camalote, Crescencio López, América y Cotap
El parte epidemiológico fue detallado esta mañana en una conferencia de prensa, vía streaming, por el subsecretario de Salud Pública, Alejandro García, y Marcela Ramírez de la Dirección de Salud Mental. “En las últimas semanas hemos tenido un aumento en el número de confirmados por casos por transmisión comunitaria en el barrio Gran toba y aledaños”, explicó García.
Cerca del gobernador admiten que la situación en el Toba es alarmante. “Si no fuera por los indicadores que salen de los barrios, en Resistencia estaríamos bien”, comenta un asesor de Capitanich. La semana pasada, la tasa de positividad fue del 75% en el Gran Toba.
"Exigimos efectivos controles, transparencia y cambio de rumbo en el accionar de la cuarentena al gobernador y la ministra de Salud Pública”, planteó el el diputado provincial de la UCR, Alejandro Aradas. “La falta de respuesta y haber dejado de funcionar en forma unilateral el comité de emergencia significa un ninguneo”, se queja Aradas ante PERFIL.
“Si no fuera por los indicadores que salen de los barrios, en Resistencia estaríamos bien”, comenta un asesor de Capitanich. La tasa de positividad fue del 75% en el Gran Toba
Los integrantes del Comité de Emergencia Indígena plantean que las políticas estatales pasaron por alto las particularidades culturales de la población. Desde el gobierno reconocen las dificultades para lidiar con esa idiosincrasia. Días atrás, por ejemplo, dos personas infectadas pero sin síntomas querían abandonar el hospital Perrando y volver a su comunidad. Y así lo hicieron. Debieron dar previamente su conformidad para abandonar el hospital.
Casos como el de Perrando empujan al oficialismo chaqueño para modificar la Ley del Aborigen Chaqueño. Un objetivo del proyecto en marcha es fortalecer la capacidad instalada de los centros de salud con población indígena. Hace una semana, Capitanich se reunió por ese motivo con el ministro de Gobierno y Justicia, Juan Manuel Chapo, y el Instituto del Aborigen Chaqueño (IDACH) Orlando Charole.
Ahora, en el Toba funciona un espacio de aislamiento y otro de atención médica, en caso de urgencias. Se realizan fumigaciones y trabajos permanentes de limpieza. La recomendación general del gobierno es que los vecinos no salgan de sus casas. La crisis económica complica esa bajada de línea.
DS