Un día antes de San Valentín se celebra el Día internacional del preservativo, una jornada que persigue promover el uso responsable de este método anticonceptivo para evitar el contagio de enfermedades de transmisión sexual (ETS), infecciones, así como los embarazos no deseados a través de su distribución gratuita y actividades y eventos de concientización sobre el sexo.
La fecha fue establecida en el año 2012 por la organización AIDS Healthcare Foundation (AHF) o Fundación para el Cuidado del Sida, que atiende a más de 1 millón de pacientes en 43 países y tiene filial en Argentina. Según una encuesta que realizó en nuestro país en 2017 a 30 mil personas, sólo el 14,5 por ciento utiliza preservativo en todas sus relaciones sexuales, el 65 por ciento sólo a veces y el 20,5 por ciento no lo hace nunca.
"Los preservativos son prácticos: fáciles de transportar. Hacen una declaración sobre tus prioridades: a vos te preocupa por tu salud y la de tu pareja. Expresan quién sos: con cientos de tamaños, texturas, colores y sabores, podés seguir con el tipo que te gusta o cambiarlo cada vez. Pero lo más importante es que te traen tranquilidad, para que puedas relajarte y concentrarte en la diversión", explica en su sitio web el Director de Programas de Bienestar de la entidad, Albert Ruiz.
Algunos métodos anticonceptivos son eficaces para evitar el embarazo pero no protegen a la persona de las ETS, como el anillo vaginal, la píldora anticonceptiva o el dispositivo intrauterino, conocido popularmente como DIU. Son los que se suelen usar en las relaciones estables en las que ambos miembros de la pareja comprueban que no tienen ninguna ETS y deciden cuidarse únicamente para evitar tener un hijo.
“El preservativo de uso en cada relación cumple con las dos funciones: prevenir el embarazo y las enfermedades de transmisión sexual. Es un método aceptable, cómodo y útil en toda la población. No tiene contraindicaciones salvo la alergia al látex existiendo ya de otro material inocuo para estos pacientes”, indica a PERFIL Patricia Becerra Batan, ginecóloga y miembro de la Sociedad de Obstetricia y Ginecología (MN: 55.515).
“Un método anticonceptivo debe ser confiable, seguro, de buena compliance y reversible. El preservativo cumple con todo, siempre que se le dé un uso responsable y cubre la mayoría de las ETS”, precisa Becerra Batan.
Sólo el 15% de los argentinos utiliza siempre el preservativo
La experta indicó que el preservativo protege de:
- VIH-Sida: el virus de inmunodeficiencia humana se puede transmitir por la sangre, el semen y los flujos vaginales.
- Enfermedad pelviana inflamatoria: provocada por gérmenes involucrados en el acto sexual.
- Clamidia: se suele contraer por el sexo vaginal, anal u oral o el uso compartido de juguetes sexuales que hayan estado en contacto con la bacteria.
- Herpes, gonorrea y sífilis: estas infecciones se contraen por el contacto sexual sin protección.
- Embarazo.
“El virus del papiloma humano se contagia por contacto sexual pero no está demostrado que el preservativo pueda prevenirlo”, sostiene la especialista.
Desde la secretaría de Salud ofrecen estas recomendaciones para usar un preservativo de forma adecuada:
- Usalo desde el comienzo de la relación sexual.
- Fijate siempre la fecha de vencimiento. Sobre todo si al abrirlo notás que está quebradizo, pegajoso o visiblemente dañado.
- Nunca uses dos juntos: la fricción puede dañar el látex y hacer que se rompan.
- Abrilo con cuidado: no uses los dientes, ni una tijera. Podés romperlo sin darte cuenta.
- Después de usarlo, tiralo. Acordate de que no es reutilizable ni reciclable.
- Si vos o tu pareja necesitan lubricación extra, usá los lubricantes en base a agua para no dañar el látex.
- Tratá de no guardarlos mucho tiempo en la cartera, la billetera o un bolsillo. El calor o la humedad excesivos pueden afectar el material con el que están hechos.
Asimismo, en su web se puede consultar un mapa en el que se muestran los puntos dónde obtener preservativos de forma gratuita.
La polémica del año pasado
En julio del año pasado, en Argentina se activaron todas las alarmas cuando en una de las diversas audiencias sobre el proyecto de legalización del aborto en el plenario en el Senado el doctor Abel Albino negó la eficacia de los preservativos para prevenir ETS. “El profiláctico no la protege de nada. Porque el virus del SIDA atraviesa la porcelana".
“El virus del SIDA atraviesa la porcelana, es 500 veces más chico que el espermatozoide. Entonces el profiláctico no sirve absolutamente, porque falla en el 30%, en el embarazo… imagínense lo que puede pasar con el SIDA. Uno no está absolutamente cubierto”, insistió Albino. Sus dichos fueron ampliamente cuestionados desde la comunidad médica, educativa y política. De hecho, el Concejo Deliberante de la ciudad mendocina de Guaymallén decidió quitarle la distinción de Ciudadano Ilustre tras esas polémicas declaraciones.
