Al norte de la ciudad de Rosario, en Empalme Graneros, está el barrio “Los Pumitas”. Un lugar donde la ausencia del Estado permitió que convivan la pobreza, la violencia y los narcos.
Una zona de casas humildes donde la clase baja trabajadora cada día se las ingenia para salir adelante. Como aquel equilibrista que intenta -en este caso a través de “changas”- mantenerse sobre la delgada línea de pobreza evitando caer en la indigencia. Donde “mañana” es su futuro más lejano y su proyección más arrogante.
"Los narcos han ganado", dijo Aníbal Fernández
Un barrio cuya población son hijos y nietos de diferentes comunidades indígenas, en su mayoría QOM y Tobas. Donde los escombros arrojados sobre la vereda, los pastizales crecidos y las innumerables rejas ya son parte del escenario cotidiano. Donde no hay agua potable y el asfalto, azaroso entre las distintas intersecciones, es el último recuerdo de un Estado ausente. Olvidado. Donde ni siquiera el “clientelismo” se preocupó en sembrar votos.
Este mismo lugar donde el fiscal Adrián Spelta, perteneciente a la Unidad de Homicidios Dolosos, expresó para radio LT8 de Rosario que “se corrieron los límites”. Donde el Ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, declaró: “Los narcos han ganado”. Una zona liberada para que la violencia narco exhiba su parte más cruel. Esa violencia obscena. Dejando una familia mutilada, un banco de colegio vacío, un niño muerto.
El crimen de Máximo Jerez
Máximo Jerez cometió el terrible pecado de cruzar al kiosco a comprarse “algo” para acompañar el tereré. Tenía apenas once años. Ese niño que soñaba con tener su bicicleta, con recibir algún trofeo por jugar a la pelota. De sonrisa pícara fue otra víctima de los narcos.
Surrealismo en vivo desde Rosario, Sinaloa siempre estuvo cerca...
La bandera a media asta no alcanza para describir la tristeza. La Asociación de Magisterio de Santa Fe denunció, a través de un comunicado, que “la situación es insostenible. La violencia protagonizada por las bandas narco-policiales se ha adueñado de la región”. Mientras tanto, los narcos desparraman balas y miedo. O peor, balas y muerte mientras las fuerzas de seguridad, los políticos locales, los políticos nacionales se van acusando unos a otros.
Quién es "El Salteño", el líder de la banda narco apuntada por el crimen de Máximo Jerez
NT / ED