SOCIEDAD
Un anuncio que generó polémica

Secundaria y prácticas laborales: cómo fueron sus antecedentes en la educación argentina

Esta semana, el Ejecutivo porteño anunció que, para egresar, los alumnos de 5º año deberán realizar 120 horas de trabajo en empresas. Un experto analiza los antecedentes. Cómo será el esquema en las escuelas de nivel medio.

20211212_trabajo_pasantias_gcba_g
Programa. A diferencia de las pasantías, las prácticas educativas laborales forman parte del diseño curricular de la Secundaria del Futuro. | gcba

Esta semana, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires anunció la puesta en marcha de prácticas en ámbitos laborales para los alumnos del nivel medio. Una buena noticia que fue recibida con entusiasmo por muchos de los estudiantes y sus familias. Es justo decir que también despertó algunas suspicacias en otros estudiantes y familias. Atento a esto, parece importante poner en contexto el anuncio para que no genere expectativas –tanto positivas como negativas– injustificadas.

No es la primera vez que en la Argentina se intenta un acercamiento entre la escuela secundaria y el sector productivo. En la segunda mitad de la década de los 70, por ejemplo, se puso en marcha el Plan Dual. Se sumaba un año más de cursada a los estudiantes de las escuelas técnicas para que realizaran prácticas intensivas en empresas públicas y privadas. En los 90, el entonces gobierno nacional impulsó fuertemente la realización de prácticas y pasantías en empresas privadas. Para ello elaboró un marco normativo que facilitaba la articulación escuela-empresa. 

A principios de los 2000, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires puso en marcha un programa de pasantías que se llevaban a cabo en dependencias del propio gobierno jurisdiccional. La denominada reforma NES (2009), de la cual la versión porteña es la Secundaria del Futuro, también promueve la articulación entre educación y trabajo. Finalmente, en 2018, la actual gestión de la Ciudad implementó las prácticas profesionalizantes en todas las escuelas técnicas. Como vemos, hace al menos unos cuarenta años que se viene trabajando en esta línea. Todas estas experiencias muestran que no es sencillo conciliar las expectativas del sector productivo con las del sector educativo. Así pues, los más entusiastas deberán tener paciencia. A las autoridades educativas les espera un gran desafío. Pero, atención, que no será el único.

Punto por punto, cómo serán las prácticas laborales de estudiantes secundarios porteños

Desde el siglo XIX, se viene discutiendo (tanto a nivel de los especialistas como de la sociedad en general), cual es la finalidad de la escuela secundaria. En un principio, parecía haber acuerdo con relación a que la escuela secundaria debía ser preparatoria para los estudios universitarios. Pero en los años ´60, con la llegada al gobierno nacional de las políticas desarrollistas, comenzó a instalarse la idea de articular escuela secundaria con sector productivo. La escuela media debía servir para que los estudiantes se pudieran insertar con éxito en el mundo laboral. Había que formar jóvenes para el trabajo. 

En los ´80, con la recuperación de la democracia, la cuestión de la finalidad de la escuela secundaria tuvo un nuevo giro: había que formar jóvenes para ser ciudadanos de la democracia. La Ley de Educación Nacional (2006) recupera estos debates sobre la finalidad de la escuela secundaria argentina y plantea en su articulado que las tres cuestiones mencionadas deben ser consideradas como finalidades educativas del nivel medio. Es decir que la escuela secundaria debe preparar para los estudios universitarios, formar para el trabajo y para ser buenos ciudadanos en democracia. La implementación de un nuevo plan de prácticas y pasantías en la Ciudad de Buenos Aires, también deberá enfrentar el desafío de mantener el equilibrio entre los tres fines educativos enumerados por la ley. Si ese equilibrio se pierde en favor de uno de ellos (la formación para el trabajo) y en detrimento de los otros dos, aquellos que desconfían de las bondades de esta iniciativa habrán tenido razón.

*Magister en Educación, docente en Psicopedagogía de la Universidad Caece.