SOCIEDAD
A 37 AÑOS DE LA GUERRA

Malvinas | Así fue el segundo viaje humanitario de familiares de caídos al Cementerio de Darwin, bajo la mirada del Buenos Aires Times

Cómo fue el segundo viaje humanitario a las Islas Malvinas junto con familiares de combatientes.

Homenaje a los soldados caídos en Malvinas
Durante el homenaje, y con el permiso del gobierno británico en Malvinas, la delegación desplegó una bandera argentina por primera vez desde que terminó el conflicto bélico. | Comisión Familiares de Malvinas - Victor Bugge

"En las islas, se sintió una tensión silenciosa pero omnipresente en todo momento, pero también hubo una sensación de alivio. Tensión, porque muchos de los miembros de la familia finalmente habían descubierto el lugar de descanso de sus seres queridos, y alivio cuando pusieron un pie delante de las tumbas y finalmente lloraron su pérdida". Así relató Agustino Fonteveccia el viaje que, a mediados de marzo, realizó junto a familiares de soldados caídos en la guerra de 1982 a las Islas Malvinas.

Formaba parte del grupo de periodistas que el gobierno invitó a participar del histórico viaje, el segundo propiciado por el gobierno nacional con el beneplácito del británico. El emotivo aterrizaje en lo que hace 37 años fue escenario de una sangrienta guerra entre Argentina y el Reino Unido fue visto como un indicio de que las relaciones entre los isleños y los argentinos están perdiendo tirantez. 

El vuelo 682 de Andes despegó del aeropuerto internacional de Ezeiza en las afueras de Buenos Aires en las primeras horas de la mañana del 13 de marzo, y se dirigió directamente a Mount Pleasant, una base militar que también sirve como el principal aeropuerto del archipiélago. Transportaba a 65 familiares de soldados fallecidos en batalla y un nutrido grupo de periodistas, entre los que se encontraba Agustino Fontevecchia. 

La Guerra de las Malvinas en 26 fotos

"Muchos de los familiares de los 22 soldados caídos que fueron visitados esta semana eran ancianos", relató Fontevecchia en Buenos Aires Times. "Unos pocos estaban en sillas de ruedas. Algunos ni siquiera habían subido a un avión antes. Todos ellos, al poner un pie en Darwin, sintieron el peso de la emoción en sus hombros, mientras se dirigían a las tumbas de sus héroes".

El reencuentro de madres, padres, hermanos de los soldados argentinos que murieron bajo el fuego enemigo constituyó una imagen conmovedora para todos los presentes:  "Algunos se echaron a llorar, abrazando las simples y sencillas cruces blancas que marcan el lugar de descanso de sus seres queridos", continúa el relato. "Otros miraron ciegamente, con incredulidad. El poder de sus emociones se hizo aún más intenso por el paisaje circundante, las colinas sobre las que se libró la famosa batalla de Goose Green". 

"Un sentimiento de respeto mutuo también fue evidente", escribe el periodista. "El personal militar británico y los isleños acompañaron a las familias, presentando sus respetos, antes de permitir que los argentinos lloraran en paz a sus parientes. El proceso de curación de viejas heridas es largo, pero no cabe duda de que los esfuerzos implicados valen la pena, y mucho más".

Lea la nota completa publicada en Buenos Aires Times

ANEXO | Material de archivo: la propaganda política de la dictadura por Malvinas

ANEXO | Material de archivo: audios históricos de la guerra de Malvinas

AF DS