Las autoridades canadienses arrestaron en Vancouver a la directora de Finanzas de Huawei Technologies, Meng Wanzhou, que ahora corre el riesgo de ser extraditada a Estados Unidos, donde se investiga para saber si el gigante chino de la tecnología violó las sanciones impuestas a Irán, informó el Departamento de Justicia. La compañía uno de los más grandes fabricantes chinos de telefonía celular, está en la mira de las autoridades norteamericanas por temores ligados a la seguridad: la adquisición y uso de celulares de esta marca está prohibida en todas las agencias gubernamentales estadounidenses.
La detención de Menq Wanzhou, hija del fundador de la empresa, probablemente aumentará las ya existentes tensiones entre Washington y Pekín en el campo tecnológico, luego de la reciente tregua sobre derechos aduaneros. Para el próximo viernes está prevista la audiencia en la que un juez decidirá si libera a Menq Wanzhou bajo caución. En cualquier caso la empresaria arrestada por expreso pedido de Estados Unidos que pretende pedir su extradición.
El diario The Wall Street Journal había afirmado en abril que las autoridades estadounidenses sospechaban que Meng había violado las sanciones de Washington contra Irán.
La compañía de telecomunicaciones dijo este jueves que desconoce cualquier presunto "delito" cometido por su directora financiera: "La compañía recibió muy poca información sobre las acusaciones y no tiene conocimiento de ningún delito por parte de Meng [Wanzhou]", dijeron en un comunicado, en el que señaló que la compañía cumple todas las leyes aplicables en los países en los que opera.
Estados Unidos "solicita la extradición de Meng Wanzhou para que enfrente acusaciones no precisadas" en Nueva York, precisó la empresa, señalando que la directiva fue arrestada cuando se disponía a tomar un vuelo con escala en Canadá. Huawei dijo también "confiar en que los sistemas jurídicos canadiense y estadounidense adoptarán un conclusión justa". "Huawei respeta todas las leyes y reglamentaciones en vigor, incluidas las leyes y reglamentaciones en materia de control de exportaciones y de sanciones, adoptadas por la ONU, Estados Unidos y la Unión Europea", afirma la compañía electrónico en su comunicado.
Por su parte, China protestó por la detención y reclamó su puesta en libertad, según un comunicado de la embajada de China en Canadá. "La parte china se opone firmemente y protesta enérgicamente por este tipo de acciones que perjudicaron gravemente los derechos humanos de la víctima", dijo un comunicado, que pide que se "restaure la libertad personal de la señora Meng Wanzhou", divulgó la embajada china en Canadá en un comunicado. "A petición de la parte estadounidense, la parte canadiense arrestó a una ciudadana china que no violó ninguna ley estadounidense o canadiense", continuó la embajada.