Con una trayectoria de más de 35 años arriba de los escenarios, Enrique Bunbury, uno de los cantantes españoles más exitosos del rock n roll, anunció que no hará más conciertos después de la gira que lo tendrá rodando por los Estados Unidos y España este año.
Afectado desde hace varios años por un dolor en la garganta, el aragonés de 54 años anunció su retiro por medio de sus redes sociales: "Desde hace unos años, llevo arrastrando un malestar que me ha costado mucho localizar y comprender. Posiblemente, desde la gira de Mutaciones en el 15-16 y sobre todo en la de Expectativas, en los casi dos años y medio que duró el tour, entre el 17-19" a lo que se sumó la ausencia de dolor durante la pandemia y el aislamiento obligatorio. "El parón de las giras internacionales de 20 y el 21 me hizo pensar que quizás mi mal se había diluido y las ganas de reencontrarme con público, técnicos y músicos encima de un escenario era una fuerza mucho más poderosa. Lo que me ha sucedido en esta gira mexicana (que lleva adelante en estos momentos), corrobora todo lo contrario, y confirma y adelanta una decisión que sabía cercana", explicó.
El cuadro no parece simple: "Desde el momento que salgo de mi casa y comienzan viajes y shows, un compendio de síntomas y dolores me acompañan desde la mañana hasta el momento de subirme al show. He escuchado diferentes nombres y diagnósticos. La realidad es que mi garganta se cierra e irrita, y mis vías respiratorias dificultan el más leve ejercicio y la ejecución de mi trabajo. De manera que lo que normalmente era un placer y deleite, se ha convertido en fuente de inmenso dolor y sufrimiento. Nada de esto me ocurre jamás si no estoy de gira". Y Bunbury comunicó su determinación a todos sus fans: "Así, he tomado la decisión, muy meditada y consciente, de abandonar mi actividad interpretativa, en los conciertos y tours. Los conciertos que quedan pendientes de aquí a septiembre de 2022 en Estados Unidos y España serán los últimos que realice".
Futuro sin shows
Sobre su futuro profesional y personal, el intérprete oriundo de Zaragoza expresó: "A partir de ahora, se abre ante mí un sinfín de posibilidades, en las que lo creativo, componer canciones, grabar discos, pintar y escribir libros de poesía, forman parte de mis objetivos. Tengo la edad para hacer este cambio importante en mi vida y el apoyo de mi familia y management. Quiero agradecer y ser extremadamente respetuoso con todos los que me acompañaron hasta aquí, el público que me entregó su cariño y amor, en los más de 1.500 conciertos que he ofrecido en mi vida, en España, Europa, Latinoamérica, Estados Unidos y Japón. En estos 35 años, me he subido a los mejores escenarios del mundo y algunos de los peores, he actuado delante de 25 personas y de 250.000 y, en la mayoría de ellos, he tenido la fortuna de disfrutar de una época en la que no se veían ni mascaretas ni celulares. ¡Gracias sinceras!".
Su despedida final incluye las palabras sobre el futuro: "Espero que lo que les pueda ofrecer a partir de ahora les siga interesando mínimamente. Así, también quiero agradecer a mi banda, Los Santos Inocentes, y a todo mi equipo técnico y management. Ha sido un gran viaje. Gracias a todos".