Autor prolífico y comprometido, por su influencia se habla del teatro moderno argentino. Año a año se reestrenan todas sus obras y el público siempre acompaña.
Carlos Gorostiza (1920 - 2016). |
Vivo.
En el teatro CPM Multiescena, los viernes a las 20.30 se puede disfrutar de Aeroplanos, la obra publicada por Carlos Gorostiza en 1990. El gran dramaturgo argentino es considerado el padre del teatro moderno en nuestro país.
Descendiente de una familia vasca, nació en el barrio porteño de Palermo un 7 de junio de 1920. Influenciado por su padrastro, fue poeta y titiritero desde su adolescencia. Justamente se inició en la dramaturgia escribiendo obras para títeres. Tuvo su primera publicación en 1943 con el título de La clave encantada, con varias de esas pequeñas obras. En el ’49 le llego la puesta en escena de su primera pieza dramática, El puente, que se encargó de dirigir.
Así empezó a ser reconocido como autor y director teatral, y comenzó su prolífica carrera que tuvo un punto cumbre en 1958 con el estreno de El pan de la locura, obra que fue reestrenada con frecuencia en escenarios de otros países. Incluso tuvo éxitos en televisión, en 1962, Los otros y Toda una historia, ambas premiadas con el Martín Fierro. Es que su forma de retratar a las personas de su tiempo, con calidez y una gran cuota de realismo, lo acercó inexorablemente al público.
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Durante los años de la dictadura militar su trabajo fue prohibido y tuvo la revancha al ser uno de los principales promotores de Teatro Abierto (1981), movimiento de resistencia cultural que despertó el fervor popular. En 1984 fue nombrado Secretario de Cultura del gobierno democrático presidido por Raúl Alfonsín, cargo que mantuvo por dos años.
Después de su paso por la función pública se dedicó por completo a escribir novelas y teatro con el éxito de siempre. Sus últimas creaciones fueron estrenadas en 2011: Vuelo a Capistrano y El aire del río. En 2012 publicó De guerras y de amores – 1940-1945, un manojo de poemas de su temprana juventud.
Entre sus piezas más celebradas figuran Los hermanos queridos, El acompañamiento y Matar el tiempo, que año a año nuevos elencos las recrean en diversas salas teatrales a lo largo de más de entre 30 y 40 años.
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