ELOBSERVADOR
Entrevista

Diego Guelar: "El miedo a China es mitológico y hay que desterrarlo"

El embajador en Beijing defiende la liberalización del comercio con el país asiático y las obras con capitales chinos en territorio argentino.

Chino y vaca 09102018
Según Guelar, no hay razones para temer al avance chino. | Cedoc

Desde Beijing

 

Diego Guelar está convencido de que, así como el siglo diecinueve fue del Reino Unido y el veinte de los Estados Unidos, el siglo veintiuno será de China. O mejor dicho: es de China. Poco antes de viajar a Buenos Aires para los preparativos de la próxima cumbre del G20, el embajador argentino en Beijing recibió a PERFIL para hablar de los avances y desafíos en la relación bilateral con el país asiático.

Guelar dice que no hay razones para temerle al avance chino y que, en todo caso, se trata de mejorar la propia performance para sacar beneficio del vínculo. Por eso defiende la liberalización del comercio con China y también las obras de infraestructura desarrolladas por capitales chinos en territorio argentino. Entre otras, las dos represas en Santa Cruz que la empresa china Gezhouba construye en sociedad con Electroingeniería, cuyo dueño, Gerardo Ferreyra, está hoy detenido por la causa “cuadernos”.

—¿El actual gobierno tiende a vincularse más con EE.UU. y Europa que con China?

—No me parece. El presidente Mauricio Macri tenía a China en su radar incluso antes de asumir el cargo, y acciona personalmente sobre el empresariado argentino para que se comprenda el lugar central que hoy ocupa China. En eso no hay obstáculos políticos ni ideológicos. Existe un altísimo nivel de confianza entre los dos países.

"El presidente Mauricio Macri tenía a China en su radar incluso antes de asumir el cargo, y acciona personalmente sobre el empresariado argentino para que se comprenda el lugar central que hoy ocupa China".

—Hay algunos empresarios locales que le tienen pavor a China.

—A veces se sigue repitiendo el argumento proteccionista de empresas que concentran el abastecimiento del mercado interno. Pero el miedo a China es mitológico y hay que desterrarlo. Si uno mira a Perú, Chile, Brasil, Uruguay... todos tienen superávit comercial con China. El mercado chino está abierto. El problema es nuestro, que no producimos ni ofrecemos lo suficiente como para aprovecharlo. Hay que acabar con una cultura del aislamiento que nos dejó sin capacidad instalada ni competitividad.

"El mercado chino está abierto. El problema es nuestro, que no producimos ni ofrecemos lo suficiente como para aprovecharlo".

—¿La guerra comercial entre China y los Estados Unidos nos beneficia?

—El conflicto nunca es negocio para un país como el nuestro, cuyo lugar en el concierto mundial es marginal. Nuestro interés siempre es la cooperación internacional.

—¿Cómo va a seguir la obra de las hidroeléctricas en Santa Cruz si se complica la situación de Electroingeniería?

—La decisión del lado chino es que la obra continúa. Hay cero posibilidad de que se frene. Todavía no hubo problemas en cuanto a la prestación de las obligaciones de la empresa argentina con la UTE. No puedo saber qué va a pasar con Electroingeniería. Pero, si hubiera problemas, la empresa china conseguiría un nuevo operador local para la obra civil.

"No puedo saber qué va a pasar con Electroingeniería. Pero, si hubiera problemas, la empresa china conseguiría un nuevo operador local para las represas en Santa Cruz".

—¿La solución es correr a Electroingenería?

—No puedo dar opinión, eso es un tema de la empresa china que es la socia mayoritaria. Yo me reuní con ellos y el planteo es que todo sigue adelante. Están conversando con la empresa argentina. Obviamente son los primeros interesados en ver hasta qué punto el socio está afectado y si puede cumplir o no con sus compromisos. Si no pudiera, seguramente será sustituido.

—Otra obra con capitales chinos que se discutió mucho es la estación espacial en Neuquén, con alcance para monitorear satélites.

—Pusimos una cláusula en el tratado que dice que es para uso exclusivo civil. Tampoco hay extraterritorialidad y le corre la ley nacional. No hay que buscar fantasmas donde no los hay. Argentina tiene una ubicación geográfica ideal para la observación del espacio lejano. Es un muy rubro muy rentable y que, además, le sirve a nuestro propio programa espacial. Deberíamos ver a quién más le ofrecemos convenios para poner diez estaciones más.

 

FB CP