Unas 200 embarcaciones argentinas se encuentran varadas en Uruguay, amarradas en el puerto de Punta del Este. Estos barcos no pueden regresar a territorio nacional a causa de un impedimento administrativo producto de las medidas y protocolos sanitarios aún vigentes para combatir la pandemia de Covid-19.
Concretamente, los lugares donde deben amarrar las embarcaciones privadas en el país, tanto en Ciudad de Buenos Aires como en la provincia, no están habilitados como "corredores seguros", por lo que las naves deben permanecer en aguas uruguayas hasta que se destrabe la cuestión administrativa que los retiene.
Hasta la fecha, los turistas argentinos podían ingresar y egresar a Uruguay en auto, micro, aviones y buques comerciales tras cumplir determinados requisitos sanitarios como una declaración jurada y un PCR negativo. Sin embargo, quienes partieron en embarcaciones particulares encontraron complicado su regreso debido a conflictos burocráticos.
El turismo interno marcó un récord pese a la tercera ola de Covid-19
Según trascendió, ambas jurisdicciones, la Ciudad y la Provincia, se encuentran trabajando en la situación y han entrado en diálogo con organismos nacionales, como la Aduana, Migraciones y el Ministerio de Salud, por lo que se espera que en las próximas horas se proceda a la habilitación de distintos puertos para así permitir el reingreso de las embarcaciones de los turistas que veranearon en el país vecino.
Luis Lacalle Pou, el presidente de Uruguay, comprobó la situación por si mismo cuando en la jornada de hoy se acercó al puerto de Punta del Este con destino a la Isla de Los Lobos, lugar que esperan poder impulsar a futuro con un proyecto de ecoturismo.
AS cp