El ministro de Ambiente de la Nación, Juan Cabandié, es el eje de muchas de las críticas y sobrevoló este viernes las zonas afectadas de Corrientes, y declaró que las lluvias pronosticadas en la zona podrían aliviar en el terrible cuadro actual. La situación en Corrientes por los incendios es dramática, se han perdido cientos de miles de hectáreas, las pérdidas son incalculables y, lo que es peor, no hay todavía visos de poder controlar el avance de las llamas.
“Esperamos un frente de lluvias que podría ayudar a controlar los incendios”, celebró este viernes Cabandié. Sin embargo, el parte del Servicio Meteorológico Nacional indica que tales precipitaciones llegarían el domingo por la noche o durante la madrugada del lunes, por lo que habrá que esperar otras 48 horas para ver si esas precipitaciones (que tienen entre 10 y 40% de probabilidades) finalmente se concreta.
Así, Cabandié confía en que la lluvia logre extinguir parte de los focos activos o al menos disminuir el avance de las llamas. En un diálogo con Télam, el funcionario manifestó que “el panorama presenta algunas preocupaciones por las sequías y las altas temperaturas, además de las dificultades logísticas”.
El fuego se extendió y amenaza el sur de Misiones
El fuego no da tregua en la zona mesopotámica del país, ya que más de 600 mil hectáreas se vieron afectadas en Corrientes y las llamas ya se expandieron a la provincia de Misiones.
Los brigadistas advirtieron hoy sobre la existencia de focos activos que comenzaron a amenazar a algunas regiones del sur de la provincia de Misiones luego de consumir gran parte de los humedales de la zona de los Esteros del Iberá.
De igual forma, las regiones más afectadas aún son el centro y el norte del territorio correntino. Por esto mismo, organismos nacionales, empresas públicas y equipos especializados y vecinos del lugar trabajan de manera conjunta para combatir las llamas y salvar algo del ganado y las viviendas del lugar.
Fotos: el drama de los animales salvajes en medio de los incendios en Corrientes
El ministro de Ambiente se reunió ayer con el gobernador de Misiones, para comenzar a analizar un plan de contingencia por el avance de las llamas. Mientras se espera la llegada de las lluvias, las condiciones climáticas no contribuyen con los brigadistas, ya que las temperaturas superaron los 40 grados y la sequía en la zona es extrema, gracias al problema de la bajante del Río Paraná.
Hasta el momento, se sabe que el 9% del territorio de Corrientes se ve afectado por las llamas, que se creen fueron iniciadas intencionalmente. Además, las pérdidas económicas superarían ya los 25 mil millones de pesos.
RdC/HB