Este 3 de mayo es el Día de la Milanesa, un plato típico de la mesa de los argentinos, y para celebrarlo se elaboró una milanesa a la napolitana gigante, de cuatro metros por tres, frente a la Basílica de Luján.
Los organizadores aseguran que se trata de "la más grande del mundo", con un peso de entre 800 y mil kilogramos, y a cargo del plato gigante estuvo el chef Luciano Lopez Fuente junto al equipo de 20 cocineros de la fábrica organizadora.
Alimentos Holis, una fábrica local, anunció que frente a la Basílica de Luján se convocaron unas 1.500 personas para el evento de la elaboración de esta comida que será de cuatro metros de largo por tres de ancho.
La milanesa, el plato extranjero con más variantes argentinas
Para su elaboración se requirió: 580 kg de carne de nalga, 420 de pan rallado, 50 de muzzarella, 50 de jamón y 100 litros de salsa de tomate. Luego, la milanesa se frió en 2.000 litros de aceite a una temperatura de 140 grados entre 15 y 20 minutos.
Para la “super milanesa napolitana” se diseñó una sartén especial, de 4,5 metros de largo por 3,2 metros de ancho y con unos 50 centímetros de alzada.
Cómo se originó la milanesa napolitana
Atribuida originalmente a la ciudad italiana de Milán, la milanesa fue variando en sus formas y presentaciones hasta la actualidad.
En nuestro país, con la llegada de inmigrantes, el origen de la llamada “milanesa napolitana” se ubica en la década del 50 del siglo pasado.
En una fonda que estaba ubicada frente al estadio Luna Park de Buenos Aires, cuyo dueño se llamaba José Nápoli, al cocinero se le quemó una tanda de milanesas. Para disimular, las cubrió con salsa de tomate y queso mozzarella, como si se tratara de una pizza, lo que marcó el origen de este plato.