Este 18 de marzo se celebra el Día Mundial del Sueño. El objetivo de esta fecha es dar a conocer y concientizar sobre la importancia de llevar adelante un buen descanso. Además, informa sobre cómo tratar y evitar los problemas que pueden afectar la salud de las personas que no descansan correctamente.
Esta efeméride fue creada por iniciativa de un grupo de proveedores y miembros de la comunidad médica vinculados a la investigación y medicina del sueño. Asimismo, su conmemoración es promovida año a año por la Asociación Mundial de Medicina del Sueño y otras organizaciones especializadas en el descanso humano.
¿Por qué dormir bien mejora la calidad de vida?
Estudios al respecto afirman que la calidad de vida de los seres humanos mejora notablemente cuando se le dedica suficiente tiempo a tener un buen descanso. En promedio, se estima que una persona adulta requiere entre 7 y 8 horas de sueño para descansar correctamente y restaurar las funciones del organismo.
Tener un buen sueño provee de muchos beneficios, entre ellos:
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Aumenta la regeneración celular y disminuye los signos de envejecimiento
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Mejora el rendimiento cognitivo (memoria, concentración y aprendizaje)
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Descansa el corazón y reduce la presión
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Fortalece el sistema inmunológico
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Descansan y se regeneran los músculos
En caso de no poder disfrutar de un descanso óptimo, es probable que el cuerpo comience a experimentar cambios y alteraciones que pueden conllevar a complicaciones más graves e incluso llegan a asociarse a enfermedades degenerativas.
Soñar y dormir bien es un derecho que la pandemia terminó de arruinarnos
Algunas consecuencias de no dormir correctamente pueden ser cambios de humor, incrementos de los niveles de azúcar en sangre (diabetes), aumentos de la presión arterial e inflamación (potenciales enfermedades del corazón), obesidad, debilidad del sistema inmunológico, ansiedad y depresión.
¿Cuáles son los principales trastornos del sueño?
La falta de sueño puede provocar daños severos a la salud, entre ellos se encuentran los trastornos del sueño. Estos son cambios en los patrones o hábitos del descanso que resultan perjudiciales para quien los padece.
Los principales trastornos del sueño son:
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Apnea del sueño: patrones anormales en la respiración que interrumpen el sueño profundo.
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Insomnio: dificultad para conciliar el sueño o permanecer dormido durante un periodo extenso.
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Narcolepsia: somnolencia extrema durante el día, también conocido como trastorno crónico del sueño.
En caso de sufrir un trastorno del sueño, es recomendable realizar una consulta médica para aplicar el tratamiento correcto y efectivo.
AS.
