El 30 de noviembre es el Día Nacional del Teatro, en Argentina. El espíritu teatral argentino estuvo inmerso en nuestra cultura desde que tuvo su primera sede, en la época colonial.
Las artes escénicas se presentaban en diferentes lugares, hasta que un 30 de noviembre de 1783 tuvo su casa oficial en los patios de La Ranchería, con una obra especialmente solicitada por el Virrey Juan José de Vértiz y Salcedo. Ese día quedó institucionalizado como el Día Nacional del Teatro.
La comedia, el sainete y el grotesco fueron las primeras expresiones de teatro que se presentaban en la ciudad colonial de Buenos Aires. Francisco Velarde fue a quien se encomendó la construcción del espacio teatral, en un depósito de frutas y verduras que llegaban desde las misiones jesuíticas.
Teatro argentino colonial
Para la construcción se solicitó crear espacios separados entre hombres y mujeres e incluir la censura previa antes de cada exposición.
Las instalaciones quedaban en lo que hoy conocemos como las calles Alsina y Perú, y que antes eran las esquinas de las calles San Carlos y San José. Hasta entonces, el lugar servía para guardar las frutas y verduras que la Compañía de Jesús enviaba desde las misiones. El teatro se iluminaba con velas de cebo alrededor de toda la sala y el escenario tenia las velas ubicadas en las candilejas.
Las paredes de madera y el techo de paja del nuevo teatro fueron vulnerables al incendio ocurrido en 1792 cuando un cohete fue disparado de la Iglesia San Juan Bautista y cayó en el techo del teatro. El fuego acabó por completo con la edificación.
En ese entonces las temáticas eran solo de tipo religioso y político. Los personajes eran caracterizados por personas que nunca antes habían recibido clases de teatro. Los personajes femeninos principales eran interpretados por hombres, hasta 1790. Eran producciones dirigidas a la clase media y a la social alta, representada por el entorno del virrey. La entrada era gratuita pero financiada por ciudadanos de la elite porteña.
El primer teatro financió al Hospital de Niños
En 1783 el Virrey Juan José de Vértiz y Salcedo ordenó que los fondos sean donados a la Casa de los Niños Expósitos, actual Hospital de Niños Pedro de Elizalde.
Hoy las temáticas de las obras teatrales son muy diversas y el teatro es una profesión. Fue con la designación de Buenos Aires como capital del Rio de la Plata, que la zona tomó realce y la concurrencia fue creciendo.
La primera obra teatral criolla estrenada en La Ranchería fue la tragedia en verso Siripo, de Manuel de Lavardén, con un tema americano no religioso. Como complemento a la obra, los actores y actrices cantaban acompañados de guitarras. También la adornaban los bailes de boleras y seguidillas.
Desde aquel Decreto Ejecutivo nº 1586 para declarar el Día Nacional del Teatro, la profesión escénica se ha profesionalizado y trascendido las fronteras nacionales.
Los teatros se han perfeccionado hasta llegar a la joya argentina, el Teatro Colón. María Victoria Alcaraz, actual Directora General del Teatro Colón desde diciembre de 2015, sostiene que el teatro está siempre en al centro de todo: “Los argentinos nos aferramos al teatro para sobrevivir”, expresó en una entrevista concedida al diario El País.
La ciudad costera de Mal del Plata y Villa Carlos Paz, en Córdoba, se convirtieron en el otros dos polos teatrales de enorme peso durante todo el año. La Pandemia golpeo mucho la actividad teatral, que trata de ir recuperándose.
MM
