Cumplido un año del comienzo de la pandemia de coronavirus y con más de dos millones de casos registrados en el país, los argentinos mantienen el temor al covid: un 82% percibe al coronavirus como un factor de alta peligrosidad, mientras que una de cada dos personas lo considera una gran amenaza para la salud pública del país.
Así lo muestra una encuesta del Observatorio de la Psicología Social aplicada de la Facultad de Psicología de la UBA, que mide las distintas variables desde los primeros días de confinamiento en nuestro país. El estudio analizó las respuestas de 3.078 personas, consultadas en los grandes conglomerados del país, entre el 3 y el 10 de marzo de 2021, con un error muestral de más/ menos 1,8%
De acuerdo a estos datos, un 82% percibe al coronavirus como un factor de alta peligrosidad, mientras que una de cada dos personas lo considera una gran amenaza para la salud pública del país.
Asimismo, en cuanto al temor al contagio, una gran mayoría (73%) señala que está entre “muy asustada” (34%) y “un poco asustada” (39%) por la posibilidad de contraer el Covid-19. A su vez, un 55% señala que pensó alguna vez que podía estar contagiado, mientras que un 9% lo piensa todo el tiempo.
Encuesta: miedo y depresión, los sentimientos que más aumentaron en la cuarentena
En tanto, la curva de salud mental muestra “mejores indicadores” en comparación con la obtenida a los seis meses de pandemia, en plena etapa de aislamiento obligatorio, dicen desde el Observatorio.
Si bien se siguen evidenciando valores altos en incertidumbre, preocupación, ansiedad, angustia y tristeza, con indicadores de emociones negativas venían creciendo en intensidad desde el inicio del ASPO, esta es la primera vez que aparece un cambio de tendencia, con todo el espectro de indicadores a la baja.
Este quiebre en la tendencia hacia el empeoramiento, señalan, puede deberse a distintas razones:
- Haber podido disfrutar de una temporada de vacaciones, que permitió en alguna medida bajar los niveles de hartazgo/ bronca y agotamiento emocional- cognitivo que había generado un largo confinamiento.
- El retorno a las actividades laborales, que implicó para muchos comenzar a recuperar sus ingresos y sanear su economía personal y familiar.
- El retorno a la clases presenciales de los niños y adolescentes, que permitió volver a ordenar la vida familiar y laboral.
En esa línea, el estudio expone que la salud física y la situación económica personal son las dos principales preocupaciones, con porcentajes similares de respuestas. En tercer lugar se ubica la preocupación por la salud mental. No obstante, se observa una gran paridad entre las tres opciones.
Coronavirus y Salud Mental: la curva que no vemos
En el caso de las mujeres, manifiestan una mayor preocupación por su salud física, mientras que los hombres lo hacen por su economía. Los más jóvenes, en tanto, presentan “preocupación más alta por la economía personal y la salud mental, a diferencia de los adultos mayores que se sienten más preocupados por su salud física”.
Además, detallan que hay “una asociación negativa entre clase social y la preocupación por la economía personal”: es decir, a medida que se baja en la pirámide social, sube la preocupación por lo económico.
Por el contrario, se presenta “una asociación positiva entre clase social y preocupación por la salud física”: a medida que se sube en la pirámide social, también se sube en la preocupación por la salud física.
Balance del año de pandemia
En su mayoría, los más de tres mil consultados realizan un balance del año de la pandemia y el confinamiento “claramente negativo”. “Las emociones y sentimientos que mejor expresan ese balance son: incertidumbre, tristeza, angustia, miedo, soledad, desastre y pérdida”, mientras que el impacto más negativo de la crisis sanitaria “ha sido lo económico, el trabajo y en la salud mental”.
Sin embargo, no todo es visto de manera negativa. En cuanto a los aspectos positivos del año, lo más mencionado tiene que ver con la oportunidad que brindó la situación social inédita de aislamiento “para la reflexión, el autoconocimiento y el replanteo de valores y prioridades de vida”, sostiene el sondeo.
La evaluación del gobierno durante la pandemia
Respecto de la evaluación que hicieron los consultados sobre la gestión de la crisis que está llevando adelante el presidente Alberto Fernández, señala que tiene hoy un 30% de aprobación. Este indicador ha bajado siete puntos porcentuales respecto a la medición de septiembre de 2020, “y constituye el nivel más bajo de aprobación desde que iniciamos la serie”, expresan desde el Observatorio.
En la misma línea, sostienen que “ha caido significativamente la imagen positiva del Presidente, situándose en el nivel más bajo desde que comenzamos las mediciones: un 32%”. “Su saldo entre imagen positiva/negativa arroja un diferencial negativo de -36%, el más bajo desde que asumió la presidencia”, enuncian.
Por su parte, el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta también ha experimentado “una baja en su nivel de aprobación de gestión de 10 puntos porcentuales”. “No obstante esta caída, el Jefe de Gobierno de CABA sigue superando al Presidente (+20 puntos) y al Gobernador de la Provincia de Buenos Aires (+11 puntos)”, explican.
En tanto, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, “registró una suba de 6 puntos porcentuales, alcanzando un nivel de aprobación de 39%. De esta manera, por primera vez superó a Alberto Fernández por 9 puntos porcentuales”.
El estudio completo:
A.G./ CP
