Ben Smith, un ex agente de la Agencia Central de Inteligencia estadounidense (CIA), está investigando un diario de notas que pertenecía a Jesse Marcel, otro ex oficial de inteligencia, que podría tener evidencia en código respecto al misterioso ovni que protagonizó el renombrado Incidente Roswell.
Smith procederá a dirigir una nueva investigación para determinar de una vez por todas qué ocurrió en avistamiento precedido por un accidente en Nuevo México, Estados Unidos, hace 75 años.
Para poder desencriptar el cifrado, ha estado trabajando con geólogos, expertos en escritura y ufólogos. Su exhaustiva labor se verá reflejada en un nuevo documental de seis partes denominado “Roswell: The First Witness” (Roswell: El Primer Testigo).
¿Qué es el Incidente Rosswell?
El 8 de julio de 1947, el Campo Aéreo del Ejército de Roswell (RAAF) distribuyó un comunicado de prensa mediante el cual afirmaba que habían encontrado restos de los que parecía ser un "disco volador" que, supuestamente, se estrellado en el desierto.
Como era de esperarse, la noticia se convirtió en el titular de todos los diarios en Estados Unidos. Viendo la repercusión que había tenido la noticia, la institución aérea daría marcha atrás sobre la información difundida.
Tan solo un día después, negaría sus declaraciones y, a través de un segundo testimonio, reconocería que en realidad solo se trataba de un pequeño globo meteorológico que había tenido el infortunio de estrellarse.
El difusión del informe desconcertó a los ciudadanos estadounidenses a la vez que generó incertidumbre respecto de lo que se había encontrado allí. Momentos después del accidente, las piezas de aquel objeto habían sido removidos.
¿Cuál es su relación con Jesse Marcel?
Seis días antes del comunicado distribuido por el RAAF, un ranchero local de Nuevo México informó el descubrimiento de los escombros en el fondo de su residencia. Ante la noticia, enviarían a Jesse Marcel a echar un vistazo.
Marcel sería quien, por orden directa a la agencia de inteligencia para la que trabajaba, llevaría parte del materia encontrado de regreso su base además de dejar una parte en Fort Worth, Texas para proceder con un examen más detenido.
A finales de los 70, el ex agente revelaría ante investigadores de ovnis que las fotos posteriores de él junto a los escombros habían sido solo un montaje para la prensa, como parte de un elaborado plan para engañar a público.
Acto seguido, afirmó que el Ejército fue quien tomó posesión de las piezas reales mientras que a él se le ordenada coordinar el encubrimiento de lo que realmente habían encontrado aquel día.
Según su vivida ilustración del acontecimiento, cuando llegó a Roswell, se encontró un material extremadamente brillante que parecía una lámina. Años después, reconoció ante su familia que lo que encontró no fue hecho por manos humanas. Sin embargo, no podía admitirlo ya que recibía presiones del gobierno de Estados Unidos.
Durante aquellos años, Marcel aparentemente redactó el resto de sus experiencias en un diario, el cual hoy es propiedad del ex agente Ben Smith quien, atraído por el misterio, se encuentra investigándolo de principio a fin,
Ben Smith y el misterioso diario: "Hubo encubrimiento"
En una entrevista al Sun Online, reveló haber escuchado rumores sobre dicho diario durante años y sintió la necesidad imperante de comenzar a investigarlo cuando lo tuvo consigo: "El diario podría significar todo. Si eres historiador, este es el documento principal que quieres estudiar”.
"Cuando lo abres y lo miras, surgen algunas preguntas inmediatas sobre su valor (para la investigación)" continuó para luego asegurar con determinación que el diario podría incluso contener mensajes secretos que, sí se pueden descifrar, develarían un misterio de larga duración.
"Hacemos todo lo posible para poner a prueba este diario. Primero tenemos que autenticarlo, ¿está escrito por Jesse Marcel? ¿Tiene código? Y, si es así, ¿podemos descifrarlo?".
Sobre un posible encubrimiento por parte del gobierno de Estados Unidos, reconoció: "Sabemos, casi de manera concluyente, que hubo un encubrimiento del gobierno. Incluso el gobierno afirma que hubo un encubrimiento"
"No envidio al gobierno por hacer eso, pero el punto de inflexión es si podemos confiar en nuestro gobierno en absoluto. Se están lastimando a sí mismos al no revelar más sobre lo que sabe sobre este tema" lamentó.
Concluyendo con la entrevista, reflexionó: "Todavía podemos sentir el impacto del incidente de Roswell 70 años después de la forma en que no lo hacemos con otros encubrimientos".
JFG / DS