La Cumbre de las Américas lo hizo. Alberto Fernández y Jaír Bolsonaro dialogaron en Los Ángeles en la previa a los discursos presidenciales del jueves. Para el gobierno argentino, el segundo encuentro cara a cara entre los mandatarios se trató de apenas un segundo cruce informal pero para el jefe de Brasil fue también el inicio del deshielo de un vínculo que tuvo muchos choques.
La gestión de Alberto Fernández siempre buscó bajarle el tono a las citas e intentos de encuentro con su par brasileño y este segundo encuentro no fue la excepción. Sucedió con la charla que mantuvieron un año atrás en el G 20, pero también cuando dos años atrás, Bolsonaro invitó al jefe de Estado Argentino a verse por primera vez en suelo uruguayo para la entonces asunción de Luis Lacalle Pou, una propuesta que nunca terminó de convencer a Fernández y que se terminó desactivando.
El primer cara a cara llegó recién en la Cumbre de Líderes del G 20 del año pasado. En aquel entonces la delegación argentina remarcaba la soledad del brasileño y lo contrastaban con la cantidad de bilaterales conseguidas por Fernández.
En aquella charla coincidieron en la idea de fortalecer el Mercado Común del Sur (Mercosur) y luego hablaron en forma jocosa de fútbol, ya que para la Copa América Bolsonaro había pronosticado una goleada de Brasil por 5 a 0.
Alberto en la Cumbre: cena y brindis con Biden, bilateral con Trudeau y con el jefe de la ONU
Esta vez y en el año del mundial, también tuvieron tiempo para bromear sobre el fútbol, pero Bolsonaro decidió charlar en la necesidad de importar gas a nuestro país a través de las reservas de Vaca Muerta. En este diálogo que mantuvieron antes de dar inicio a los discursos presidenciales, también repasaron los números de habitantes de cada país que ahora habitan en Estados Unidos.
El gobierno de Fernández buscó restarle impronta a este segundo encuentro entre los jefes de Estado, que se da en medio de la partida de Daniel Scioli de Brasil como embajador. No siquiera fue mencionado por nadie de la comitiva, a pesar de que también participó de la charla el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa y fue a la vista del resto de los funcionarios que llegaron hasta el Centro de Convenciones como el canciller, Santiago Cafiero y el secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello. Incluso, en el entorno presidencial, se animan a describir el rol de Bolsonaro en encuentros Internacionales como el de un “actor de reparto”.
El apoyo a Lula Da Silva que la gestión de Fernández demuestra también tiene que ver con no hacer alarde de este segundo cara a cara aunque entienden la necesidad de Bolsonaro de buscar esta foto en medio de su debilidad política ante las elecciones de octubre.
En dos años y medio de gestión, Fernández y Bolsonaro nunca pudieron -y quisieron- acordaron una reunión bilateral. Pero una cumbre lo hizo otra vez y ambos se mostraron cordiales.