Si hace un año pensábamos que era caro llenar la mochila de útiles escolares, habrá que prepararse para el retorno a las aulas en este 2021. Es que según señaló la Asociación Consumidores Libres luego de un relevamiento de los principales artículos vinculados con la escuela, el costo general de la canasta escolar muestra aumentos del orden del 50% respecto al año pasado.
Varios de los artículos, sin embargo, tuvieron subas mucho más pronunciadas y lideran la lista, como el lápiz negro de grafito, en el que verificaron aumentos de hasta 128,5%; el compás de plástico, con suba de 125%; las témperas, 85,7% más caras; las etiquetas (75%) y los resaltadores, que cuestan un 71,4% más en el verano pasado, cuando todavía la pandemia no había hecho estragos en la educación y en los comercios.
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A tono con la inflación, el muestreo publicado por Consumidores Libres, detalló que las mochilas cuestan según su diseño y calidad desde $1.500 a $8.000. Consumidores Libres señaló además en el listado publicado en su web que el guardapolvo recto con botones para un chico en los primeros grados cuesta ahora $1.100; es decir 50,6% más caro que hace un año. El precio, como se sabe, comienza a subir desde ahí forma directamente proporcional al talle que se requiera.
Para un chico de pie mediano (del talle 20 al 26) las clásicas zapatillas blancas de lona cuestan en promedio $980 (55,5% más caras que el año anterior), mientras que las de talles entre 29 y 38 no se consiguen por menos de $1.200 (aumentaron 53,8%).
Respecto de los útiles, el valor de la canasta de todo lo que un chico requiere para cumplimentar con tareas, actividades, manualidades, carpetas, cuadernos, etc. puede llegar a los $4.552, dado que saltó un 50,7% en 2021 frente al año anterior.
Vayamos sumando: para llenar una mochila con útiles escolares y llevar a la escuela un alumno con guardapolvo y zapatillas nuevas, se necesitarán en promedio cerca de $9.000
Como en la provincia de Buenos Aires, los alumnos que requieran recuperar contenidos deberán estar disponibles para concurrir a sus respectivos colegios a partir del 17 de febrero, cada familia tendrá que prever que ese gasto debería realizarse ya en febrero, igual que para los chicos que concurran a escuelas de la Ciudad de Buenos Aires. Por supuesto, ninguno de estos precios relevados incluye el costo de los libros y manuales de estudio que requiera el seguimiento de cada materia.
