De acuerdo con información suministrada por el especialista Juan Luis Uccelli, las exportaciones de carne de cerdo en los primeros 10 meses del año fueron de 36.461 toneladas, que significan un 69,9% de aumento con respecto al mismo período de 2019. Se proyecta que al final del año se alcanzarán las 42 mil toneladas.
En la balanza comercial, las importaciones (36.461 toneladas) fueron de 39,090 millones de dólares, mientras que las exportaciones (14.886) generaron 66,132 millones de dólares, represetando superávits del 145% en cantidad y 69% en divisas.
En los primeros 10 meses del año fueron de 36.461 toneladas, un 69,9% de aumento con respecto al mismo período de 2019.
En declaraciones radiales a Infopork, Guillermo Proietto, Gerente del consorcio exportador Argenpork, comentó que “el 2020 viene siendo un año variado y cambiante y largo, porque todavía no ha terminado y todos los días hay muchas variantes en el mercado. Empezamos un primer semestre con el inicio de la pandemia que trajo muchos problemas para la colocación de la producción de cerdos. En el segundo semestre todo cambió, se han podido limpiar los stocks, el precio del cerdo se recuperó y hay hasta cierto faltante. Estamos viendo que el mercado interno en los últimos días le está costando tomar los precios del aumento que tuvo la carne porcina”.
En cuanto al futuro, Proietto observa que “el mercado de carnes viene siendo muy volátil, por ejemplo se empieza a escuchar que hay ciertos procesos de recomposición del stock en China de forma silenciosa. La proyección de que faltante de carne de cerdo en China que iba a durar unos 10 años, quizás se reduzca y por eso el final de la película sea otro”.
Tranqueras adentro, el gerente de Argenpork manifestó que “el productor viene teniendo un aumento de costos del cereal, por lo tanto la ecuación no es fácil, el panorama es complejo, se vienen dando cambios de variables en forma permanente, por eso se hace muy difícil proyectar a mediano y largo plazo”. Sin embargo, Proietto observa que “las perspectivas siguen siendo buenas, con alta volatilidad, tanto Argentina como el mundo seguirán demandando proteína animal, tenemos posibilidades de crecimiento. Tenemos muchos desafíos a nivel productivos”.