macri y milei

Una relación con altibajos y con cuestiones sin resolver

¿Unidos?. El presidente y su antecesor, estrechando manos. Foto: cedoc

Desde que comenzaron a hablar por teléfono, cuando Javier Milei siquiera pensaba en ser jefe de Estado y Mauricio Macri se sentía atraído por un personaje mediático, ya diputado nacional, que difundía ideas que él mismo compartía.

Ya durante el camino a las PASO de 2023 hablaron varias por teléfono y, tras las primarias, siguieron en contacto. Incluso un periodista político de los más reconocidos puso su piso como escenario para que se encuentren.

La relación creció y la casa del expresidente fue el escenario del ya mítico “Pacto de Acassusso”, por la casona que alquilaba Macri en octubre de 2023 para reunir a Patricia Bullrich y Milei, y lograr un acuerdo clave para la victoria del libertario en el ballottagge. Entre otros: la fiscalización que estuvo a cargo del PRO.

El 2024 los encontró juntos: el partido amarillo logró sacar las leyes que quería la Casa Rosada, incluída la ley Bases. Pero ya para septiembre de ese año Macri empezó a notar que todas sus recomendaciones, desde funcionarios hasta temas de gestión, era ignoradas olímpicamente.

Apenas algunos mensajes de Whatsapp los unieron. Y, tras cuatro encuentros con milanesas, la relación se enfrió. A tal punto que el enfrentamiento en la Ciudad los encontró lejos: cada uno haciendo campaña por sus candidatos, con una batalla muy dura. El domingo pasado, tras un año, volvieron a reunirse. Y ayer concretaron un segundo encuentro.