AT&T Inc. cerró sus operaciones de DirecTV en Venezuela, argumentando sanciones estadounidenses al país.
La compañía no pudo cumplir con los requisitos legales de ambos países, y la decisión de cerrar las transmisiones de televisión por satélite fue tomada por ejecutivos estadounidenses, informó AT&T en un comunicado el martes.
Estados Unidos ha impuesto una serie de sanciones a Venezuela durante más de una década. Como resultado, AT&T, con sede en Dallas, quedó atrapada entre las órdenes de su propio país y los mandatos del Gobierno venezolano. AT&T tiene más de 600 empleados de DirecTV en la nación sudamericana.
DirecTV es el líder en el mercado de televisión de pago en Venezuela, con 1,9 millones de usuarios, o 45% del total, según datos publicados por el regulador estatal Conatel a mediados de 2019.
En marzo, el presidente Nicolás Maduro ordenó a las empresas de telecomunicaciones continuar ofreciendo sus servicios durante la cuarentena, incluso si los clientes no pueden pagarlos.
“Durante los próximos seis meses, está prohibido cortar los servicios de telecomunicaciones en el país”, dijo Maduro desde el palacio presidencial el 22 de marzo. Venezuela ha reportado 618 casos de coronavirus y 10 muertes.
La orden podría haber obligado a proveedores como AT&T a operar con pérdidas.
En 2015, poco después de comprar DirecTV, AT&T rebajó casi todo el valor contable del negocio de DirecTV en Venezuela.
El cierre de uno de los medios de televisión y noticias más grandes de Venezuela es solo el último golpe al país, que ya ha sufrido apagones y fallas en internet. Bajo los mandatos de Maduro y el fallecido expresidente Hugo Chávez, medios de comunicación privados y de oposición han estado bajo presión para restringir cierta programación.
A medida que la infraestructura pública de telecomunicaciones se ha deteriorado, las órdenes de censura y los apagones de internet del régimen de Maduro han dejado a los venezolanos con poco acceso a canales locales de entretenimiento y noticias. Las redes de televisión del Gobierno ofrecen solo una visión limitada de lo que está ocurriendo en el país.
Aquellos que han podido pagarlo han dependido de operadores de servicios satelitales como DirecTV para acceder a redes locales e internacionales. El Gobierno de Venezuela ha presionado a los operadores para que bloqueen redes extranjeras como Caracol, RCN y CNN en Español, de AT&T, con el pretexto de que intentan avivar los disturbios en el país.