El impacto inmediato de las sanciones de EE.UU. sobre el petróleo de Venezuela comenzó a ser evidente cuando un barco petrolero que se dirigía a la nación latinoamericana con petróleo refinado desde EE.UU. dio media vuelta.
El Horizon Aphrodite, reservado por la unidad Citgo Petroleum de Petróleos de Venezuela SA, reversó su rumbo en el Golfo de México mientras se dirigía al puerto José el martes, según datos compilados por Bloomberg. El destino que sigue apareciendo es la instalación de importación venezolana.
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Si bien los detalles de la carga del barco no están especificados, Venezuela requiere derivados del petróleo para diluir parte de su crudo. El país importó cerca de 90.000 barriles diarios de nafta para propósitos del año pasado, según datos compilados por Bloomberg. Se espera que las sanciones anunciadas por EE.UU. dificulten conseguir el llamado diluyente.