El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, entró en otra polémica con los gobernadores estatales y la Corte Suprema de Brasil al incorporar los gimnasios, salones de belleza y barberías a la lista de actividades que deberían permanecer abiertas durante la crisis del coronavirus.
La decisión, que tomó por sorpresa a su propio ministro de Salud, es cuestionada por varios gobernadores que han implementado medidas para frenar la propagación del virus. La pandemia, que ha dejado más de 11.000 víctimas fatales en Brasil y no muestra señales de ceder, también ha afectado la popularidad de Bolsonaro.
“Todo permanecerá cerrado aquí”, dijo por mensaje de texto Helder Barbalho, gobernador del estado de Pará, al norte del país. “Brasil tiene realidades muy diferentes, la mía aquí es combatir el virus y salvar la vida de nuestra población”.
El vecino estado de Maranhão, el más pobre de Brasil, tampoco disminuirá las restricciones. El gobernador Flavio Dino, quien impuso medidas de confinamiento en las ciudades con más casos, hizo alusión a un paseo en moto acuática que hizo el presidente durante el fin de semana para criticar su decisión. “¿El próximo decreto de Bolsonaro determinará que el esquí acuático es una actividad esencial?”, tuiteó.
Bolsonaro ha culpado de la inevitable crisis económica impulsada por la pandemia a las medidas de cuarentena y confinamiento adoptadas por los gobernadores estatales, estrategia que ha provocado enfrentamientos abiertos con enemigos políticos e incluso antiguos aliados.
La popularidad de Bolsonaro se ha visto afectada por la crisis, ya que la mayoría de los brasileños cree que las pautas de distanciamiento social deben ser respetadas por toda la población, según un sondeo de MDA/CNT, que encuestó a 2.002 personas entre el 7 y el 10 de mayo. La encuesta mostró que el índice de aprobación personal del presidente bajó 9 puntos porcentuales desde comienzos de año a 39%, y su índice de desaprobación alcanzó 55%.
Incluso el ministro de Salud, Nelson Teich, pareció sorprendido cuando se le informó de la decisión de Bolsonaro de dar autorización a más empresas durante una conferencia de prensa que realizó para presentar un plan para reabrir la economía.
“¿Se anunció esto hoy?”, preguntó a sus asesores mientras los periodistas le daban detalles del próximo decreto presidencial. “No, no pasó por el ministerio, no es nuestra atribución, es la decisión del presidente”.
Teich asumió el cargo hace solo tres semanas, período durante el cual las muertes relacionadas con el coronavirus se han disparado en 475%.