Las temperaturas extraordinariamente altas y bajas que se están volviendo cada vez más comunes a medida que se acelera el cambio climático son responsables de cinco millones de muertes en todo el mundo cada año.
Las condiciones atmosféricas extremas representaron el 9,4% de todas las muertes a nivel mundial entre 2000 y 2019, según investigadores que publicaron el primer estudio que vincula los cambios en las temperaturas con los aumentos anuales en la mortalidad.
Si bien la mayoría de las muertes ha sido causada por la exposición al frío, es probable que la tendencia se invierta a medida que el planeta se calienta, dijeron.
“A largo plazo, se espera que el cambio climático aumente la carga de mortalidad”, a medida que se elevan las cifras de muertes relacionadas con el calor, dijo Guo Yuming, uno de los autores del informe y profesor de la Universidad de Monash. Este verano ya han muerto cientos de personas por las olas de calor que azotan el hemisferio norte.
Las últimas dos décadas fueron las más calurosas desde la era preindustrial, y durante ese período ocurrieron los 10 años más cálidos de los que se tenga registro. El calentamiento global continúa acelerándose; el planeta va rumbo a calentarse cerca de de 3 °C por encima del promedio preindustrial, según estimaciones de la organización sin fines de lucro Climate Action Tracker. Los científicos proyectan que un calentamiento de más de 2 °C sería catastrófico para la vida en la Tierra.
El calentamiento global es mucho peor de lo que pensábamos
Investigadores de Monash, en Australia, y de la Universidad de Shandong, en China, estimaron que hubo un exceso de 74 muertes por temperaturas anormalmente bajas o altas por cada 100.000 personas. El artículo, publicado en The Lancet Planetary Health, analizó la mortalidad en 43 países de todos los continentes. También concluyó que las muertes relacionadas con el frío disminuyeron en 0,5% entre 2000 y 2019, mientras que las muertes relacionadas con el calor aumentaron en 0,2%.
MF CP