El principal diplomático de Justin Trudeau dijo que Canadá seguirá presionando a Cuba para ayudar a resolver la crisis política de Venezuela.
El ministro de Relaciones Exteriores, Francois-Philippe Champagne, hizo la promesa el lunes junto a Juan Guaidó, el líder de la oposición venezolana que busca derrocar al presidente Nicolás Maduro. Sus comentarios llegan más de un año después de que el gobierno canadiense comenzara a desempeñar un rol activista, en un esfuerzo por ayudar a acabar el control de Maduro sobre el poder.
Durante una conferencia de prensa en Ottawa, Champagne destacó las condiciones cada vez más graves que se espera expulsen a seis millones de personas del país sudamericano rico en petróleo para fines de año. “Obviamente nos involucraremos con Cuba”, dijo a periodistas en el Ministerio de Relaciones Exteriores. “La solución debe provenir de la región, por lo que trabajaremos con la región”.
El presidente estadounidense, Donald Trump, acusa al gobierno comunista de La Habana de apuntalar a Maduro y ha endurecido constantemente las sanciones sobre la isla caribeña. Canadá ha tomado un rumbo diferente, con tres rondas de conversaciones cara a cara de alto nivel con Cuba el año pasado.
Guaidó, hablando en español, dijo que no es “secreto” que Cuba está brindando apoyo tanto ideológico como de inteligencia a Maduro, cuyo predecesor, Hugo Chávez, fue asesorado por Fidel Castro. El líder de la oposición, que desafió la prohibición de viajar con la esperanza de reavivar el apoyo internacional, ofreció elogios cautelosos por el intento de poner a La Habana de su lado.
"Creemos que los esfuerzos de Canadá con diferentes países, incluido Cuba, son muy positivos para encontrar una solución", dijo Guaidó.
Un alto funcionario cubano dijo en abril que su gobierno deseaba ayudar a negociar un fin pacífico de la crisis política, siempre que Maduro lo solicite. La Embajada de Cuba en Ottawa no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios. “Nuestro objetivo sigue siendo la restauración de la democracia y los derechos humanos en Venezuela a través de elecciones anticipadas, que deberían ser libres y justas bajo observación internacional”, dijo Champagne.
Guaidó –a quien se le bloqueó la entrada al Parlamento en Caracas a principios de este año, en una medida que permitió que un leal de Maduro fuera elegido como líder en su lugar– enfatizó la necesidad de una solución local a la crisis de su país. “Son los venezolanos los que deben decidir el futuro de Venezuela”, dijo Guaidó, quien tiene programado celebrar una reunión privada con Trudeau el lunes por la noche.