El Gobierno de Estados Unidos se puso en contacto con Pekín para proponer otra ronda de conversaciones comerciales luego que discusiones previas concluyeran sin señales de avance, de acuerdo con tres personas familiarizadas con el tema. Las acciones estadounidenses subieron ante las expectativas de que el evento pueda aliviar las crecientes tensiones.
Altos funcionarios encabezados por el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, extendieron hace poco la invitación a sus contrapartes en China, incluido el viceprimer ministro, Liu He, informó más temprano el miércoles el Wall Street Journal, citando fuentes anónimas. EE.UU. propuso conversaciones para las próximas semanas, y señaló que podrían realizarse en Washington o Pekín, según el informe.
La guerra comercial de Trump afectaría a EEUU de pies a cabeza
La propuesta puede aliviar las tensiones bilaterales solo días después de que el presidente Donald Trump amenazara con imponer aranceles a casi todos los bienes que EE.UU. compra a China. El Promedio Industrial Dow Jones pasó a territorio positivo y los activos de mercados emergentes repuntaron tras la noticia.
La Casa Blanca ha intentado presionar a Pekín para que reduzca su superávit comercial con EE.UU. y proteja los derechos de propiedad intelectual de las empresas estadounidenses. La administración Trump ya ha impuesto aranceles sobre US$50.000 millones de exportaciones chinas desde julio, lo que generó represalias inmediatas del mismo tipo por parte de Pekín. China ha dicho que se vería obligada a tomar represalias contra todas las medidas de EE.UU., lo que avivó las preocupaciones de que una guerra comercial pueda afectar el panorama económico mundial.
La última ronda de conversaciones bilaterales se realizó entre el subsecretario de Asuntos Internacionales del Departamento del Tesoro de EE.UU., David Malpass, y el viceministro de Comercio de China, Wang Shouwen. La reunión, que se celebró el mes pasado en Washington, finalizó sin que ninguna de las partes prometiera reducir los aranceles.