Aunque la administración de Donald Trump amenaza con cerrar la frontera con México, la migración de las moléculas de gas natural a través de tuberías probablemente no será obstaculizada.
El gas fluye hacia México a un ritmo récord este año y se elevó a un máximo histórico de 5.300 millones de pies cúbicos el 30 de enero, según datos de BloombergNEF. Es una salida cada vez más importante para la oferta de shale [esquisto] para apoyar los precios en EE.UU., donde la producción continúa aumentando.
"Creo que la intención de EE.UU. es cerrar solo las entregas en la superficie", dijo Laurent Key, un analista de BloombergNEF, en un correo electrónico. "Los flujos de gas del gasoducto son vitales para México y una exportación neta para EE.UU. Entonces, apuesto a que no están afectados".
Hay tanto gas que brota de la Cuenca Pérmica como subproducto de la perforación petrolífera que los precios allí cayeron a un mínimo de -US$9 por millón de unidades térmicas británicas el miércoles, según Intercontinental Exchange. En tanto, México necesita el gas estadounidense para generar energía para fábricas y hogares.